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Laia Estrada (CUP): "Si ERC sigue haciendo lo que ha hecho la sociovergencia, estará allanando el camino del PSC"

Laia Estrada, diputada de la CUP.
La diputada de la CUP Laia Estrada. — Cedida por la CUP


La diputada de la CUP en el Parlament Laia Estrada (Tarragona, 1982) habla en esta entrevista con Público sobre la recta final de la legislatura que afronta Pere Aragonès, las negociaciones por los presupuestos y sanidad, una de las principales áreas de su trabajo en la Cámara.

Estrada califica de "decepcionante" la actitud de ERC respecto a la gestión de los servicios públicos: "Todo lo que ya habíamos visto que había hecho la sociovergencia, que es permitir que se haga negocio sin ningún tipo de escrúpulos, Esquerra Republicana no es capaz de enfrentarse a ello y revertirlo".

La diputada constata cómo el malestar en la sanidad, de especial intensidad tras la firma del tercer acuerdo del Institut Català de la Salut (ICS), no viene de nuevo y considera que "se está desperdiciando la legislatura para corregir carencias graves que arrastra el modelo sanitario".

La firma del tercer acuerdo del ICS ha comportado huelgas de distintos colectivos como enfermeras y técnicos sanitarios. ¿A qué se debe?

"En la sanidad tenemos mucho malestar acumulado a consecuencia de una dejadez de hace años"

A una mala gestión de las distintas consejerías que ha habido. El malestar que estamos viendo ahora y que ya se vio hace un año, cuando también hubo huelgas importantes, no se cuece en una única legislatura. Es la acumulación de años de no haber cuidado a la gente que cuida de nosotros. Había muchas expectativas depositadas en ese acuerdo y no se han cumplido. Es un acuerdo clasista y patriarcal, lo decimos no sólo nosotros sino expertas como el Foro Catalán de Atención Primaria. Se carga totalmente a los equipos.

¿Por qué?

Pone todas las mejoras o gran parte al colectivo de médicos, que está perfecto que tengan sus mejoras, pero no a costa de desatender las carencias o reclamaciones del resto de profesionales. Estamos hablando de enfermeros, pero también de técnicos, de TCAI, técnicos de laboratorio, de radiología, de personal administrativo, de trabajadores sociales sanitarios... O sea, al final el sistema sanitario está conformado por muchos colectivos profesionales y es un engranaje muy complejo. El sistema se sostiene gracias al sobreesfuerzo que llevan años haciendo.

¿Y qué ha fallado?

Cuando la conselleria, que no es la patronal de una empresa privada, pone sobre la mesa una propuesta que es clasista y patriarcal porque se come todo lo que es la labor de cuidado, el malestar está más que justificado.

¿Cree que se ha primado a los médicos de forma intencionada?

Creo que ha sido una decisión política el priorizar sólo a un colectivo. Tenemos mucho malestar acumulado como consecuencia de una dejadez que se acumula desde hace años.

Se acaba de ratificar este acuerdo. ¿Qué margen existe para reconducirlo?

"Tenemos un modelo sanitario que fomenta que se haga negocio a expensas de la salud de la población"

Pues ahora, por supuesto, la cosa está más complicada. Nosotros llevamos una moción al Parlament en diciembre cuando todavía no se había publicado en el DOGC y por tanto había un punto concreto que pedía corregir estos agravios. Esto no ha querido hacerse. Ahora el margen que hay es realizar estas mejoras al margen del acuerdo, encontrando las fórmulas y los mecanismos que consideren ellos oportunos. Lo que está claro es que debe haber una partida presupuestaria ligada. Es obligación de todas las formaciones que estamos diciendo a los profesionales que tienen nuestro apoyo ponerlo sobre la mesa cuando hablamos de presupuestos con el Govern.

Las enfermeras finalmente han desconvocado la huelga indefinida después de un acuerdo con el Govern. ¿Cree que es un punto de partida para empezar a mejorar la situación?

Hay que aplaudir la honestidad y la transparencia con la que han actuado tras el acuerdo con la conselleria, que contrasta con la actitud del Govern. Una vez más, ha sido totalmente lamentable, lejos de resolver el malestar lo que ha hecho es presionar y forzar una desconvocatoria de una huelga y no escuchar lo que están reclamando. No ha estado a la altura. Creo que se cierra en falso el conflicto. Hay otras fuerzas sindicales que tendrán que valorar qué hacen, pero no es fácil sostener una huelga indefinida. Yo creo que debemos sacar aprendizajes, la lucha en la defensa de la sanidad pública es titánica porque hay que transformar el sistema de arriba abajo.

¿Se ha podido hacer frente a algunos de los retos pendientes en sanidad en esta legislatura?

Pues como en otros muchos ámbitos, en la salud se está desperdiciando la legislatura para corregir carencias graves que arrastra el modelo sanitario que tenemos. Nosotros pensamos que el problema es el modelo y de ahí emanan todas las problemáticas, porque es un modelo que fomenta que se haga negocio a expensas de la salud de la población. Se ve con la lógica mercantilista que impera en el sistema sanitario y que exprime a las trabajadoras, pero también se ve en cómo se van eliminando servicios. En los CAP, por ejemplo, se han cerrado urgencias, servicios de pediatría, de ginecología... Bajo esa lógica de optimizar recursos. Y esto va en detrimento de la población y de las trabajadoras.

¿Qué no se ha hecho?

No sólo no se han corregido los agravios que acumulábamos resultantes del modelo de concertación público-privada, como son el hospitalocentrismo y la explotación de las trabajadoras, y la confusión entre los intereses públicos y privados, sino que se está profundizando en ellos. Es grave que tengamos un sistema en el que los intereses privados y públicos se confunden tantísimo. Hay un parasitismo clarísimo por parte de las mutuas y los intereses privados de lo que es el sistema público.

¿Cómo se está ahondando en ello?

Existe la excepción puntual concreta, anecdótica, de la rehabilitación, que está muy bien que se internalice, pero ¿qué ocurre con el transporte sanitario? Lo tenemos atascado con la proposición de ley. Se sabe de las prácticas mafiosas de las empresas de ambulancias y que acaba pagando la población. O, por ejemplo, con todo lo que tiene que ver con el hospitalocentrismo, que hace que los CAP cada vez estén más debilitados y que la gente acabe yendo a urgencias [hospitalarias]. Tampoco se ha planificado el relevo de muchísimas profesionales que se van a jubilar. Es que no se ha revertido nada en absoluto.

¿Eso les sorprende?

"No puede ser que el Govern haga trilerismo con el presupuesto en salud"

Es que todo esto está ocurriendo con un gobierno de Esquerra Republicana. Vimos unos recortes brutales en sanidad por parte de Convergència con el señor Boi Ruiz, vimos que habían sido planificados por el tripartito con el PSC al frente de la Conselleria de Salut, y ahora lo que hemos visto, no esta legislatura, sino también desde hace prácticamente 10 años, es que el partido de ERC lo que hace es mantener esa lógica de la concertación. Y en las bases del Pacte Nacional de Salut lo que se está cociendo es mantener ese sistema. Cuando la gente en la calle lo que está pidiendo es una sanidad 100% pública, porque todo el mundo están viendo que cada vez estamos peor en cuanto a provisionamiento público.

¿Qué propuestas hacen para revertir esto?

Para empezar, si quieres revertir esta confusión entre los intereses públicos y privados, lo que tienes que hacer es publificar. Esto significa, por un lado, gestionar de forma directa y, además, por quien tiene las competencias. Es decir, no se trata de ir creando más empresas de la Generalitat, sino que el Institut Català de la Salut vaya asumiendo, por ejemplo, la gestión de todos los conciertos que tenemos caducados. Ahora mismo tenemos una treintena de conciertos caducados. Es una barbaridad. Existe una oportunidad para asumir la gestión de estos hospitales y CAP que están concertados, y esto no se ha estudiado. Está en stand by en una situación de dudosa legalidad.

La diputada de la CUP Laia Estrada.
La diputada de la CUP Laia Estrada. Cedida per la CUP

¿Y en lo que se refiere a la primaria?

Presupuesto. Lo que no puede ser es que se haga trilerismo con esto. O sea, los últimos presupuestos eran un 18% para la atención primaria. El cálculo era muy sencillo: unos 2.000 millones en primaria, de los 12.000 millones en salud, haces el cálculo y sale un 18%. Pero el Govern hablaba del 24%, para intentar aproximar la cifra a la reclamación del 25%. No hace falta hacer trilerismo, lo que hace falta es dotar de presupuesto a la primaria hasta llegar a ese 25% que recomiendan todos los expertos. Y que no se haga con nuevos perfiles, porque lo que necesitamos son más equipos de atención primaria, más médicas, enfermeras, TCAIS, personal administrativo...

Salut está impulsando algunos cambios, como un nuevo modelo de atención pediátrica, disponible sólo en algunos CAP.

No hay que sacar servicios, hay que fortalecerlos, si acaso. Lo que no puede ser es que estemos avanzando hacia este modelo de concentración de la atención pediátrica... Después, el tema del colapso de las urgencias hospitalarias debería estar planificando de forma real cuando tienes epidemias estacionales. Mejorar las condiciones laborales para tener más profesionales, fortalecer la atención primaria y que se pueda gestionar de forma directa para empezar a poner fin a esta transferencia continua de dinero público a manos privadas. Tres cosas muy sencillas que deberían estar haciéndose y que se esperaría que se hicieran por parte de un gobierno de izquierdas.

La pasada semana se votaron las conclusiones del grupo de trabajo sobre residencias. ¿Qué balance hace?

"Que no se cuestione que la mayor parte de residencias estén en manos privadas afecta a la calidad del servicio"

Muy negativo. Se constata que el Parlament, de nuevo, no estuvo a la altura en el momento en que se negó la posibilidad de continuar la comisión de investigación que impulsamos la CUP la pasada legislatura. Hubo un acuerdo de PSC, ERC y Junts para impedir que prosperara. Era lo que tocaba hacer viendo que la Fiscalía está tapándolo todo.

¿Qué hubiera podido hacerse?

Al menos, que el Parlament hubiera dado ejemplo. Para dar garantías de no repetición lo que debes hacer es buscar la verdad y esto requiere una investigación. Esto no se hizo. En las conclusiones que previsiblemente se votarán en la Comisión de Derechos Sociales han quedado fuera muchas cuestiones que para nosotros eran importantísimas, como, por ejemplo, todo lo que tiene que ver con el modelo. Tenemos residencias que funcionan como sociosanitarios pero low cost.

Una residencia es un hogar, no un centro sanitario. Pero le sale más barato a la Administración tenerlo de esa manera. Y, en segundo lugar, que no se cuestione en absoluto el hecho de que la mayor parte de las residencias de este país estén en manos privadas afecta directamente a la calidad del servicio, porque existe muchísima precariedad, se escatima al máximo en costes... Al final, estas empresas no gestionan las residencias por altruismo ni por buena voluntad, sino porque lo tienen como un negocio.

¿Por qué no se ha podido hacer una auditoría sobre lo ocurrido en las residencias durante la pandemia?

"A PSC, ERC y Junts no les interesa que se vea qué pasó en las residencias durante la pandemia"

Hay un acuerdo en tanto que aquí hay distintos gobiernos implicados. Es decir, el gobierno de la Generalitat es responsable de lo que ocurrió a nivel de Catalunya y el gobierno del Estado también, lógicamente, porque hubo un momento en el que se asumieron todas las competencias. Por tanto, a PSC, ERC y Junts, que son los partidos que tocan poder, no les interesa que se vea realmente qué es lo que sucedió.

En el momento más duro sí se habló de cambiar el modelo. ¿Ahora ya no interesa?

No hay la menor intención de enfrentarse con estos grandes lobbies que controlan no sólo las residencias, sino los servicios públicos. Al final estamos hablando de grandes empresas, y no hay esa voluntad de enfrentarse a ellas. Ahora mismo están cerrando residencias públicas, la de Reus, en Les Borges del Camp... Le pedimos a la Generalitat que ejerza sus competencias, que asuma la titularidad y la gestión de las residencias. Todo lo que ya habíamos visto que había hecho la sociovergencia con los servicios públicos, que es permitir que se haga negocio sin ningún tipo de escrúpulos, Esquerra Republicana no es capaz de enfrentarse a ello y revertirlo. Actúa con el mismo servilismo, aunque en la teoría digan que no están de acuerdo. Y esto es decepcionante.

¿Cómo ve la gestión de la sequía?

"No hay la menor intención de enfrentarse con los 'lobbies' que controlan los servicios públicos"

Hay una parte de hipocresía, o irresponsabilidad, en todo... Cuando tú estás cortando el grifo al campesinado, por ejemplo, pero al sector turístico no quieres incomodarlo. Esto ya ha pasado. Y mientras no dejas de forma clara la puerta cerrada a esta lógica de macroproyectos, que son grandes consumidores de recursos hídricos y forman parte del modelo de país que nos ha conducido a la situación de emergencia climática en la que nos encontramos.

Se está volviendo a hablar de un trasvase del Ebro que ha generado mucho rechazo en el sur de Catalunya.

Es una medida que lógicamente impactará de forma clarísima en el Delta, mientras que por otra parte se habla de protegerlo y no se aborda la necesidad de revertir el trasvase del Camp de Tarragona, que sirve básicamente para abastecer a la petroquímica. Una vez secados todos los acuíferos que teníamos, también los ríos Francolí y Gaià, pues ahora quieren seguir secando también al Ebro.

Sigue sobre la mesa el macrocomplejo del Hard Rock, que consumiría una gran cantidad de agua.

"El Hard Rock es una contradicción, es un contrasentido y es puro negacionismo climático"

Lo que no puede ser es que estén diciendo que quieren traer más agua del Ebro y que a la vez sean incapaces de decir que no habrá Hard Rock y no habrá más proyectos que sean altamente consumidores de recursos hídricos. Es una contradicción, es un contrasentido y es puro negacionismo climático. No es compatible decir que se quiere abordar la gran problemática de la sequía y no asumir con seriedad la necesidad de un cambio de modelo de país que deje atrás el desarrollismo.

Concretamente con el Hard Rock nosotros pensamos que los informes que faltan necesariamente deben ser desfavorables y que aquí se está posponiendo que se hagan públicos porque a Esquerra le interesa volver a jugarlo como moneda de cambio con el PSC para los presupuestos. Lo que debe hacer ERC es comprometerse con el país a no sacar adelante el Hard Rock por pura responsabilidad.

Para los presupuestos, reclaman un cambio de alianzas de ERC, pero ¿con quién?

Es trabajo del Govern buscar la suma y hacer posible la aritmética. La cuestión es qué quiere hacer este gobierno de Esquerra Republicana en este tiempo de descuento para que acabe la legislatura. ¿Quiere seguir con esta dinámica de continuismo respecto a lo que ha habido hasta ahora, de desatender las principales urgencias que tiene el país sin profundizar en las políticas que necesita, por puro servilismo, porque no quiere incomodar a los dueños, la gente que controla realmente el país en términos económicos? Debe decidir si quiere esto o realmente quiere ponerse al servicio de la gente.

¿Qué plantean?

Hablamos de políticas de vivienda que sean valientes no sólo presupuestariamente, se trata de evitar que haya desahucios, de regular de forma efectiva los alquileres... También de si quieren aprovechar esta legislatura para hacer frente a ese encarecimiento de la vida que está ahogando a la población, es necesario que realmente grave a los más ricos y podamos hacer políticas redistributivas, o empezar a pensar en herramientas que no se han utilizado hasta ahora como puede ser una distribuidora pública, por ejemplo. Aquí hay unas urgencias de país que se han desatendido porque no quieren tocarse los intereses de la gente rica de este país, que es Foment, la patronal, etc. Y, por tanto, el socio que se elige es el PSC, lógicamente.

¿Qué mensaje envía a ERC?

"El Parlament está más vacío de soberanía que nunca"

La CUP estamos planteando unas propuestas que pensamos que son de sentido común, que son las que necesita el país, y Esquerra Republicana debe escoger si quiere aprovechar lo que queda de la legislatura para desplegarlas de una vez por todas o continuar haciendo lo mismo que ha hecho toda la vida la sociovergencia. Si sigue haciendo esto, lo que está haciendo es allanar el camino del PSC a la Generalitat, porque está aplicando su programa. Y habrá desperdiciado totalmente esta legislatura, que empezamos con una mayoría independentista y de izquierdas, y en la que ha aplicado políticas socioliberales supeditadas a Madrid, porque el Parlament está más vacío de soberanía que nunca.

¿Por qué?

O sea, no se legisla. Ni siquiera en lo que tenemos competencias y, ya no digamos, con intentar desbordar las competencias que tenemos para garantizar derechos.

¿Qué condiciones ponen a ERC para votar los presupuestos?

"En el Parlament ya hemos visto debates en los que Junts adopta el discurso racista de la extrema derecha"

Estamos en una fase en la que no hemos entrado en negociaciones de partidas, sino en ver si compartimos el marco, las urgencias. Hemos hecho un par de reuniones. Son modelos antagónicos, el nuestro y lo que está planteando el PSC, eso es totalmente cierto. Y la aritmética es trabajo del gobierno. Hacer los equilibrios necesarios y utilizar su poder de negociación. Esquerra Republicana debe elegir: ¿Qué quiere? ¿Hacer frente a la emergencia climática o hacer más Hard Rock? ¿Seguir desahuciando y seguir permitiendo que los fondos de inversión cada vez acumulen más pisos vacíos o garantizar que la gente tiene casa? ¿Que la gente pueda tener acceso a una sanidad de calidad o permitir que cada vez más CAP estén sin servicios? Se trata de eso, de que elija.

¿Preocupa que el discurso racista entre en el Parlament, más allá de Vox?

Ya ha entrado. En el momento en que se habla de política securitaria se le da ese enfoque. Y aquí en el Parlament ya hemos visto debates en los que Junts per Catalunya adopta buena parte del discurso racista de la extrema derecha, ya sea catalanista o españolista. Y es triste, porque cuando Junts per Catalunya, en este caso concreto, pide las competencias en inmigración, no lo hace desde una lógica de decir "vamos a cohesionar el país para que esto nos permita avanzar en nuestro derecho a la autodeterminación", sino que lo hace desde esa lógica de la extrema derecha. Es una auténtica irresponsabilidad, porque además lo hacen para arañar cuatro votos, cuando lo que hacen es fortalecer a la extrema derecha, precisamente.

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