Flavio Briatore está devastado por la suspensión de por vida que le ha impuesto el órgano rector de la Fórmula Uno por su participación en el escándalo de arreglo de carreras y podría iniciar acciones legales contra la entidad, dijeron el martes medios italianos.

El extrovertido ex director de Renault fue sentenciado el lunes por la Federación Internacional del Automóvil (FIA) por haber amañando el Gran Premio de Singapur del año pasado, al ordenar al piloto Nelson Piquet Jr. que chocara de forma intencionada.

"Estoy angustiado", confesó el italiano de 59 años, citado por el periódico de su país La Gazzetta dello Sport.

Las informaciones indicaron que Briatore estaba estudiando iniciar acciones legales contra la FIA en los tribunales de París para intentar demostrar su inocencia y obtener una compensación por los daños que ha sufrido su imagen.

Las informaciones no aportaron detalles.

Briatore se fue de Renault la semana pasada junto al jefe de ingeniería Pat Symonds, quien el lunes fue suspendido por cinco años por el mismo escándalo.

Renault, ex campeón del mundo en 2005 y 2006, optó por no impugnar las acusaciones en su contra y por eso recibió una sanción de dos años en suspenso hasta el final de la temporada 2011.

El doble campeón mundial con Renault, el español Fernando Alonso, quien ganó la carrera en Singapur tras el choque de Piquet, quedó absuelto de cualquier vinculación con el caso.

Por otra parte, el brasileño Piquet recibió la inmunidad como recompensa por decir la verdad.

SANCIÓN "EXCESIVA"

Carlos García, presidente de la Federación Española de Automovilismo y miembro del Consejo Mundial del Deporte Motor de la FIA, se mostró sorprendido por la sanción de por vida impuesta a Briatore.

"La (sanción) de Briatore me parece excesiva, no había pruebas claras en su contra y él no pudo defenderse", sostuvo el directivo español en declaraciones al sitio de Internet del diario As (www.as.com).

"Además, yo no descartaría que acuda ante la justicia ordinaria por quedarse sin su medio de vida", añadió.

Briatore, socio del director comercial de la F-1, Bernie Ecclestone, y figura importante en la Asociación de Equipos de Fórmula Uno (FOTA, por sus siglas en inglés), no se presentó en la audiencia que tuvo lugar el lunes en París.

El italiano recibió una prohibición para realizar cualquier actividad dentro de la F-1, lo que significa que ya no podrá representar a Piquet, Alonso y otros pilotos como el australiano Mark Webber, de Red Bull.

Los medios señalaron que podría considerar la posibilidad de formar una categoría paralela para competir en la F-1.

Briatore fue uno de los que ideó la posibilidad de montar otro campeonato durante la larga disputa que enfrentó a la FIA con varias escuderías, además de haber sido un constante crítico del deporte, al que llegó a calificar de aburrido.