El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha felicitado al nuevo presidente ruso, Dmitri Medvédev, en la confianza de "consolidar los intereses comunes" y firmar un nuevo acuerdo de cooperación estratégica.

"Cualquier tipo de diálogo siempre es mejor que cerrar la puerta, y por eso queremos comprometernos de forma más intensa con Rusia en todas las áreas, incluidas las que se preocupan por la libertad de los medios, la democracia y los derechos humanos", ha justificado hoy la portavoz europea de Asuntos Exteriores, Christiane Hohmann.

Sobre las deficiencias detectadas en los comicios por los observadores de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE), la portavoz ha recalcado que siempre que la UE ha tenido algún problema con Rusia "se lo ha hecho saber por los cauces adecuados" y durante los "contactos regulares" entre ambos.

En este sentido, recordó la "preocupación" que hizo pública Bruselas por la renuncia de la Oficina para las Instituciones Democráticas y los Derechos Humanos (ODIHR) de la OSCE a participar en el proceso de elecciones presidenciales debido a las trabas impuestas por Moscú.

En el mensaje al nuevo presidente, Barroso confía en que Rusia y la UE "consolidarán y desarrollarán sus acuerdos estratégicos, basados no sólo en intereses comunes sino en el respeto a los valores que ambos declaramos como nuestro compromiso", asegura Barroso.

Dicha frase, según el portavoz de la Comisión, Amadeu Altafaj, es "clara" a la hora de demostrar que la UE no renuncia a sus principios al querer establecer un vínculo más estrecho con Rusia, a pesar de las deficiencias democráticas que se denuncian en este país.

"Lo que quiere la Comisión es comenzar las conversaciones sobre un Acuerdo de Asociación cuanto antes, porque así podremos trabajar más intensamente en todas las áreas", insistió Hohmann.

Este ambicioso pacto, que incluye importantes avances en materia energética, ha estado bloqueado por Polonia en protesta por el veto ruso a sus productos cárnicos, pero se espera que el cambio de gobierno polaco favorezca un retorno a la mesa de diálogo bajo la actual presidencia de turno eslovena.