El servicio de ginecología del hospital Arnau de Vilanova de Valencia ha realizado la extirpación del útero y los ovarios a una paciente a través del ombligo utilizando microcámaras y pinzas robóticas, con lo cual se evitaron cicatrices y se redujo el tiempo del postoperatorio.

La intervención se realizó mediante cirugía laparoscópica con una sola vía de acceso, una técnica alternativa a la cirugía laparoscópica convencional que consiste en introducir una microcámara y unas pinzas robóticas flexibles por una incisión umbilical.

Estas pinzas robóticas intuitivas son capaces de realizar movimientos de 180º en oposición a los movimientos del cirujano, lo que permite acceder a la zona afectada aunque no se disponga de ángulo.

Por su parte, la cámara utilizada en esta intervención disponía de una óptica de pequeño diámetro y gran luminosidad, así como de un ángulo de visión de 30º para salvar la dificultad de intervenir desde una sola vía de acceso.

La principal ventaja de esta técnica respecto a la cirugía laparoscópica convencional es la disminución del trauma quirúrgico.

Asimismo, con este tipo de cirugía también se obtienen mejores resultados estéticos y se reduce el tiempo de recuperación postoperatoria; de hecho, la paciente fue dada de alta a las 24 horas de la intervención sin cicatrices.

Según explicó Juan Gilabert, jefe del servicio de ginecología del hospital Arnau de Vilanova, "la gran ventaja de esta técnica es que con una sola incisión de tamaño similar al que se emplea para introducir la óptica en el resto de cirugías laparoscópicas, podemos llevar a cabo la misma intervención minimizando aún más la invasión quirúrgica".

Además, afirmó que este procedimiento "es un paso previo a la robótica, que ya se está implantando en todo el mundo con muy buenos resultados".

Por otra parte, Gilabert destacó que la puesta en marcha de esta técnica forma parte del programa de investigación y desarrollo de las técnicas laparoscópicas de la Escuela de Ginecología Endoscópica Europea (EGES-Valencia) del hospital Arnau de Vilanova.