Por Feliciano Tisera

General Motors tiene un plan de recorte de plantilla para la planta de Opel en España similar al que manejaba el fabricante canadiense de componentes de automoción Magna, y pedirá el viernes ayuda al Gobierno español para invertir en su marca europea.

"Tenemos un plan muy parecido al de Magna, no creo que sea peor", dijo el jueves el máximo responsable de GM para la reestructuración de su negocio europeo Opel, Nick Reilly, en la planta de Opel España.

Magna, que vio rechazada su oferta de compra por GM, tenía previsto recortar 900 empleos en España.

Reilly adelantó que GM solicitará al Gobierno español ayudas para inversión en la reunión que tendrá el viernes con representantes del ministerio de Industria.

"Estaremos encantados de recibir las ayudas que nos quieran dar", señaló Reilly.

Reilly precisó que el nuevo plan industrial de GM para la remodelación de Opel, del cual dará detalles a mediados de diciembre, necesitará 3.300 millones de dólares, frente a los 4.500 millones que costaba el de Magna.

"Primero hay que conocer el plan industrial de GM, y luego ya se verá el tema de los aspectos financieros y las posibles ayudas", dijo un portavoz del Ministerio de Industria.

SIN TRATO PREFERENTE PARA ALEMANIA

Una de las principales reclamaciones de los trabajadores de Opel España de cara a los recortes de gastos y la destrucción de empleo provenientes de la reestructuración era que estos se hicieran en base a criterios económicos e industriales y no políticos.

La planta de España tiene prestigio en el seno de la empresa por ser una de las más rentables de Opel, aunque los trabajadores temen que al momento de decidir recortes primen cuestiones políticas por el peso del Gobierno alemán, una posibilidad descartada de plano por Reilly.

"Sólo nos basaremos en criterios económicos e industriales, no políticos", dijo, y añadió que no habrá un trato preferente para Alemania.

El plan industrial de Magna, que había recibido un crédito puente de Alemania por 1.500 millones de euros, contemplaba el traslado de parte de la producción de España a la planta alemana de Eisenach, un punto que no está contemplado por GM.

"Tenemos que reducir un 20 por ciento la producción en toda Europa por la caída de la demanda, pero no estamos contemplando un traslado de producción de esta planta", dijo Reilly.

Sin embargo, el responsable de GM no descartó la posibilidad de cerrar alguna planta en Europa.

"Intentaremos no hacerlo, pero no sabemos cómo se llevará a cabo la reducción de producción", dijo.

La automotriz estadounidense decidió el pasado 3 de noviembre no vender su división europea Opel al grupo canadiense Magna, y dijo que la planta de Figueruelas en Zaragoza es una 'operación clave' en el futuro de la empresa en Europa.

La representación sindical de Opel España dijo el jueves a Reuters que no aceptará negociar más despidos que los 900 que acordó con Magna, desde los casi 2.000 que inicialmente deseaba el grupo canadiense.

GM ha dicho que la remodelación de Opel podría suponer un recorte de hasta 10.000 puestos de trabajo en Europa.

La planta de Figueruelas en Zaragoza da trabajo a 7.500 personas de los 50.000 que tiene GM en Europa.