Este artículo se publicó hace 14 años.
Todos a una: Irlanda no es España
Gobierno, PSOE e incluso el PP se desmarcan de hacer similitudes entre el país rescatado y España
Hay "inestabilidad en los mercados", Irlanda —antaño modelo del 'milagro neoliberal' que era alabado por el mismo Mariano Rajoy— ha aceptado que rescaten su economía, y España sufre con especial dureza el embate de la crisis. Pero Irlanda no es España y España no es Grecia.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha subrayado ante la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE que, a pesar del momento de "inestabilidad en los mercados", las situaciones de España e Irlanda no son en absoluto "comparables", según ha explicado en rueda de prensa posterior el secretario de Organización del partido, Marcelino Iglesias.
"El problema de Irlanda han sido los bancos", ha remarcado Iglesias, mientras que en España el sistema financiero ha sido "resistente", gracias al "control" y a la "regulación" por parte del Banco de España, y así lo confirmaron las pruebas de resistencia publicadas el pasado verano. Y como muestra un botón: los test de resistencia publicados el pasado verano remarcaron que el sistema financiero español era de los más sólidos de Europa.
El PP no compara Irlanda con España, aunque piensa que el problema es la existencia de Zapatero
El problema que sufre Irlanda no es comparable a España. En eso coinciden todos. Hasta el PP. La secretaria general de los conservadores, María Dolores de Cospedal, considera que el "problema fundamental" en materia económica que sufre España es, fundamentalmente, la "falta de confianza" que genera el Gobierno. Pese a la andanada, ha querido quitar hierro a la crítica al asegurar que la situación económica española no es "semejante" a la de Irlanda. Allí "parece que el problema lo tiene el propio sistema financiero irlandés y, afortunadamente parece que España se encuentra ahí en una situación más clara, porque el problema de España es la falta de confianza en el Gobierno. Cada situación es distinta y diversa y, por lo tanto, no son extrapolables", ha recalcado.
"Rotundamente no", ha dicho Salgado sobre una posible ayuda a España
Más optimista ha sido la ministra de Economía, Elena Salgado, quien no cree que España necesite o vaya a necesitar algún tipo de ayuda de la UE tras la solicitud de rescate de Irlanda. "Rotundamente no", ha sentenciado la titular económica en una entrevista en RNE. "España está haciendo todo lo que se había comprometido a hacer con resultados tangibles", ha agregado.
"Lo que es más importante cuando se compara con Irlanda es que el sector financiero es sólido, no sólo lo han demostrado así los estrés test, sino que yo quiero recordar que diseñamos un fondo que pudiera ayudar en las fusiones de nuestras cajas de ahorro y de ese fondo sólo ha sido necesario utilizar 11.000 milones de euros que, además, van a ser devueltos (...) No ha tenido ni va a tener ninguna repercusión sobre el presupuesto", ha dicho Salgado.
Sus palabras han sido corroboradas por la Comisión Europea, que no ve necesario que España adopte más medidas de ajuste para frenar el contagio de la crisis de deuda irlandesa. "No", ha respondido tajante el portavoz de Asuntos Económicos, Amadeu Altafaj.
El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, ha asegurado que España "no tendrá que ser rescatada" porque desde mayo está haciendo sus deberes de manera "seria y rigurosa". "Vamos en la buena dirección" recorriendo un "camino serio y riguroso", ha abundado.
Deuda pública y déficitSólo unas horas después de que Irlanda haya pedido a la UE un rescate financiero para hacer frente a sus problemas de deuda, Marcelino Iglesias ha explicado que "el grave problema" irlandés ha sido sobre todo el endeudamiento privado, "problemas en los bancos que han hecho desconfiar a los mercados". Iglesias ha señalado que, pese a no pertenecer a la Eurozona, Reino Unido y "algunos" países nórdicos están dispuestos a participar en el 'rescate'.
Pero además, ha recordado que España tiene una deuda pública 20 puntos inferior a la media de la UE y un déficit público "perfectamente reconducible" para volver por debajo del 3% en 2013.
Así, se ha desmarcado de las palabras del presidente del PNV, Iñigo Urkullu, que ha defendido que España pudo haberse visto como Irlanda si no hubiese sido por el apoyo nacionalista a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2011 —"no son comparales", ha insistido—, pero sí se ha mostrado de acuerdo en que era "imprescindible" apoyar los PGE como "herramienta" para salir de la crisis, igual que lo era apoyar "los decretos de ajuste del mes de mayo". El PNV votó en contra de este decreto y el gobierno logró aprobarlo con un voto gracias a la abstención de CiU, CC y UPN.
Portugal también elude las comparacionesConsciente de que es el siguiente en la lista de los especuladores, Portugal marcó hoy distancias con Irlanda y subrayó la buena salud de su banca y la determinación de reducir el abultado déficit fiscal luso.
Pero varios analistas financieros y medios económicos expresaron el temor de que los mercados aumenten la presión sobre Portugal, a pesar del optimismo del Gobierno, de la oposición conservadora, y de que la bolsa lusa subió mientras los intereses de la deuda bajaban con el anuncio del rescate irlandés.
En una declaración escrita, el ministro de Finanzas, Fernando Teixeira dos Santos, se mostró confiado en que Lisboa saldrá de la crisis sin ayuda y alabó el plan europeo para Irlanda porque "alivia recelos, reduce la incertidumbre y refuerza la confianza de los mercados".
Desde Bruselas, donde asiste a una reunión europea, el titular de Exteriores, Luis Amado, también destacó a los medios lusos la importancia del rescate de Dublín para evitar el "efecto de contagio" a otras economías y puntualizó que la situación de Irlanda "es bien diferente de la portuguesa".
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.