El momento ha llegado, Isabel Pantoja ya ha recogido la notificación en la que se comunica que tiene 10 días para ingresar de manera voluntaria en prisión si no hace frente al pago de la cuantiosa multa de 1.147.148,96 euros. Ha sido esta mañana cuando la tonadillera se acercaba a los juzgados de Alcobendas para recoger la temida notificación.

Ataviada con sus indistinguibles gafas de sol negras, Isabel Pantoja llegaba a dichos juzgados. A pesar de que su sobrina, Anabel Pantoja, había pedido a varios rostros conocidos como Belén Esteban y Jorge Javier Vázquez dinero para hacer frente al pago de esta cuantiosa cifra. Una petición que ha sentado mal a la cantante y por la que Anabel Pantoja pedía disculpas, simplemente por intentar ayudar a su tía.

Los días comienzan y estamos a día 9 de octubre, con lo que el plazo acabará el próximo 23 de octubre según informaba Albert Castillón en Espejo Público. Aunque Carmen Pardo para el mismo programa matizaba que, la cuenta atrás comenzaría mañana, por lo que la fecha límite se pone en el día 24. Y es que si todos pensábamos que sería el 19, el colaborador del programa matinal de Antena 3 explicaba que los sábados y domingos no se cuentan y solo se cuentan los días laborables. Todo un completo baile de días.

La cuenta atrás ya ha comenzado para la tonadillera y el pago de la friolera multa todavía no se ha producido. Paloma Barrientos explicaba en El Programa de Ana Rosa que no tiene porque pagarse toda la cifra de golpe y que se puede fraccionar dicho pago. Sin embargo, esta mañana Carmen Pardo explicaba en Espejo Publico que el pago tiene que ser total.

Pero el que la multa sea pagada no libraría a Isabel Pantoja de la cárcel ya que será la propia audiencia quién dictamine realmente si entra en prisión, aún habiendo pagado.

Los días comenzarán a pasar e Isabel Pantoja estará muy vigilada para controlar todos sus movimientos y ver que hace momentos previos a su inminente ingreso en prisión. Ingreso del que los abogados como bien se hacía eco la revista Diez Minutos, confían en que no se va a producir ya que la tonadillera está condenada a solo dos años y sin tiene antecedentes. La vorágine informativa comienza y los días empiezan a correr.