Dos tercios de los franceses desean una ley que limite el uso de los velos islámicos que cubren a las mujeres, como el niqab y el burka, y sólo una minoría respalda el plan del Gobierno para una prohibición total, indicó el sábado un sondeo.

Está previsto que el Gobierno del presidente Nicolas Sarkozy presente el lunes un proyecto de ley que prohíbe por completo el uso del velo en público, en contra de las recomendaciones de expertos legales que están a favor de una regla menos severa centrada en instituciones estatales.

Sarkozy ha defendido estrictamente la prohibición, argumentando que el velo musulmán afecta la igualdad de género y degrada a las mujeres.

El sondeo de TNS Sofres/Logica, realizado el jueves y viernes, mostró que un 33 por ciento de los franceses desea un veto absoluto, mientras que más de un 31 por ciento quiere una ley más diluida que se aplique sólo a ciertos espacios públicos.

Los resultados de la encuesta a 950 personas fueron casi los mismos para hombres y mujeres. El apoyo a algún tipo de restricción legal al uso del velo se registró sin distinción de grupos, profesiones y filiación política, aunque fue más fuerte entre votantes de derecha: más de un 80 por ciento de ellos estuvo a favor de la ley.

Al optar por una prohibición completa, Sarkozy aborda un delicado debate constitucional, dado que la práctica de usar el velo islámico puede ser defendida desde el punto de vista de la libertad religiosa.

Una ley menos estricta que pida a las mujeres no cubrirse la cara en ayuntamientos o cuando recogen a sus hijos en la escuela podría ser menos arriesgada a nivel legal, puesto que puede ser justificada como una medida de seguridad en lugar de un tema de valores.