Michelle Obama será la protagonista de la portada de la revista Vogue de marzo, en la que supone la segunda vez que una primera dama estadounidense aparece en la primera plana de una de las mayores publicaciones mundiales de moda.

Obama, de 45 años, que ha sido catalogada tanto como un nuevo símbolo de la moda, utilizó para la portada un vestido de color magenta diseñado por Jason Wu, que también diseñó el vestido de la fiesta de asunción al cargo del presidente, Barack Obama.

La reconocida fotógrafa Annie Leibovitz fue la autora de la imagen de portada así como de varias de las fotografías que se incluyen en el próximo número de Vogue.

Con la excepción de Bess Truman, todas las primeras damas desde Lou Hoover en la década de 1930 han aparecido en Vogue, pero Obama es la segunda que aparece en la portada. Hillary Clinton lo hizo en 1998.

Obama se ha ganado los aplausos de los admiradores de la moda por mezclar piezas de diseñador con prendas de tiendas comerciales como J. Crew y Gap.

El editor periodístico de Vogue, Andre Leon Talley, dijo que Obama escogió personalmente sus prendas para la sesión de fotos, de su propio guardarropa, uniendo ropa de diseñador con otra más accesibles.

"Ella (Obama) no necesita ayuda. Adora la moda y sabe lo que le queda bien. Nunca ha tenido una conversación conmigo como, '¿qué piensas?' o '¿cómo se ve esto?' y eso me enorgullece", señaló Talley.

Obama declaró en Vogue que adora la ropa, pero que la comodidad y la diversión son más importantes para ella que seguir la moda.

"Primero y lo más importante, uso lo que me gusta. En eso deben concentrarse las mujeres: lo que las hace felices, sentirse agradables y bellas. Si pudiese tener algún impacto, quiero que las mujeres se sientan bien con ellas", comentó Obama.

Mientras la primera dama ofrecía su visión sobre la moda, aclaró que la familia es su primera prioridad y sobre todo el cuidado de sus hijas Malia, de 10 años, y Sasha, de 7.

"Voy a intentar llevarlas cada mañana al colegio todo lo que pueda", dijo Obama. "Me gustaría ser una presencia en la escuela de mis hijas. Quiero conocer a los profesores; quiero conocer a los otros padres", sostuvo Obama.