El conseller de Política Territorial y Obras Públicas, Joaquim Nadal, ha mostrado hoy su indignación por la situación del servicio de Cercanías de Barcelona, pero ha dicho que su indignación tiene que ser "contenida por la racionalidad".

Según ha informado la Cadena Ser, Nadal, en declaraciones a esta emisora, ha dicho que la única diferencia entre un ciudadano de a pie y él es que su indignación tiene que ser contenida por la racionalidad, porque, si no, "estaría más indignado que cualquier ciudadano de Cataluña por la situación actual".

Las administraciones decidieron el pasado sábado, después de semanas de incidencias y de que ese mismo día se desplazara un muro-pantalla en el túnel de los Ferrocarriles de la Generalitat de Cataluña (FGC) en el Gornal, próximo a las obras del AVE, cortar el servicio de dos líneas de Cercanías y de una de los FGC para facilitar las obras de llegada de la alta velocidad a Barcelona.

Nadal ha asegurado que el restablecimiento de los servicios de Cercanías, probablemente, "tardará una semana y algunos días más" y cerca de un mes para los servicios de FGC, ya que son los más "directamente afectados" por el incidente grave del sábado.

El conseller se ha mostrado esperanzado con que en el horizonte de unas semanas, el final de las obras del AVE, la normalización de Cercanía y la concreción y ejecución urgente de nuevas obras en los servicios de Cercanías produzcan una mejora y recuperación de un atraso histórico que se ha acumulado durante 30 años.

El conseller ha asegurado que los viajeros no han estado en peligro en ningún momento y ha dicho que la prueba es que no ha habido ninguna víctima entre los usuarios del servicio, a excepción de "unos cuantos obreros muertos", por lo que el conseller ha insistido "en la seguridad de los obreros de las obras también".