Las condiciones climatológicas actuales, con cambios bruscos de temperatura, harán que la gripe afecte a un número mayor de personas que en años anteriores, concretamente, a una de cada tres.

De hecho, los neumólogos han notado un aumento en la incidencia de los primeros casos de la enfermedad este año y se estima que en 2008 podría afectar a más del 25 por ciento de la población.

Así lo ha indicado hoy el doctor Leopoldo Sánchez Agudo, de la Sociedad Madrileña de Neumología y Cirugía Torácica, quien ha explicado que las variaciones rápidas de la temperatura son un factor que aumenta la frecuencia de este tipo de infecciones.

En la temporada pasada, y según los datos de la OMS, disminuyó el número de casos en el ámbito mundial y estos descensos hacen que la población pueda reducir su nivel de inmunidad.

La campaña de vacunación contra la gripe comenzó hace algunas semanas y la población está acudiendo a inyectarse, aunque hay muchas personas de los grupos de mayor riesgo que aún no han recibido su dosis, según ha apuntado el neumólogo.

El especialista ha considerado que es necesario facilitar el acceso a la vacuna contra la gripe, ya que actualmente los centros de vacunación se concentran en unos puntos concretos, lo que ocasiona que haya largas colas y que las personas desistan.

Al respecto ha opinado que sería adecuado diversificar los puntos de vacunación, incluso potenciando la posibilidad de que se hiciera inmediatamente antes de que los pacientes sean dados de alta en las salas de especialidades en las que hay enfermedades crónicas, como pueden ser neumología y cardiología.

"Eso permitiría que en estos periodos concretos se pudiera ofrecer protección a un grupo vulnerable como son los pacientes con enfermedades respiratorias crónicas", ha argumentado.

Sánchez Agudo ha explicado que los grupos más vulnerables son las personas mayores de 60 años, los pacientes con dolencias crónicas y los profesionales que están en contacto con diversos núcleos de población como el personal sanitario o los docentes.

"Los profesores son un colectivo que debe protegerse especialmente, ya que están en contacto con distintos grupos y además trabajan en espacios cerrados, con lo que son susceptibles de contraer la gripe", ha añadido.

El neumólogo ha descrito que la gripe es una enfermedad que se puede sufrir a cualquier edad y que puede ser seria, sobre todo en personas con determinados factores de riesgo.

La repercusión de la gripe viene dada tanto por la propia enfermedad en sí -que habitualmente conlleva permanecer en cama de 5 a 7 días-, como por las complicaciones que pueden surgir y el elevado número de personas que se ven afectadas durante un brote.

La mejor época para vacunarse frente a la gripe es durante los meses de octubre y noviembre pero hacerlo después de noviembre también puede ofrecer protección.