Los presidentes de la CEOE y de Cepyme, Gerardo Díaz Ferrán y Jesús Bárcenas, se mostraron ayer satisfechos tras su reunión con el presidente del Gobierno, en la que les trasladó de primera mano el plan de ajuste anunciado el miércoles. No obstante, mostraron su preocupación por lo que consideran un 'excesivo' recorte de la inversión pública, que 'penalizaría directamente el empleo', y por el recorte en el gasto farmacéutico, que podría afectar 'a la investigación y el desarrollo'.

En su lugar y para complementar las medidas ya tomadas, la patronal propuso ayer a Rodríguez Zapatero otros capítulos en los que recortar el gasto.

Díaz Ferrán asegura que no han pedido su dimisión y que no la va a presentar

La CEOE y Cepyme consideran necesario reducir aún más la Ayuda Oficial al Desarrollo, de la que creen que se podrían recortar 2.500 millones de euros. Proponen además disminuir o directamente eliminar las subvenciones a algunos servicios públicos, además de externalizar la gestión de otros: 'Mantendría la calidad y disminuirían los costes'.

De hecho, Bárcenas y Díaz Ferrán consideran necesario abordar una reforma sanitaria y privatizar las televisiones públicas autonómicas. Otros servicios, como el ferrocarril, 'deberían acercar sus precios a sus costes reales'.

El presidente de la CEOE considera que el país no está para ninguna huelga

Sin embargo, lo más necesario a ojos de la patronal es que comunidades autónomas y ayuntamientos sigan el ejemplo del Gobierno y se aprieten el cinturón. 'Deberían hacer un mayor esfuerzo, sobre todo con la cantidad de entes y empresas públicas que han creado, muchas de las cuales se podrían eliminar', aseguró el líder de la CEOE.

En cuanto a una posible huelga general, la patronal respeta pero no comparte. 'Es un derecho constitucional que respetamos pero el país no está para ningún tipo de huelga', aseveró Díaz Ferrán. La patronal tampoco cree que estas medidas vayan a trastocar el Diálogo Social, como advirtieron los sindicatos, y subrayó su 'firme propósito' de alcanzar un acuerdo en las próximas semanas, antes de que acabe mayo.

Por otra parte, el presidente de la CEOE negó con rotundidad que algunos miembros de la patronal pidieran su dimisión en la junta directiva del pasado miércoles. 'No ha habido nadie que haya pedido mi dimisión, sí dos o tres personas preocupadas por si se podría perjudicar la imagen de la CEOE', dijo. 'Yo desde luego no voy a dimitir', concluyó.