Arjen Robben fue el protagonista positivo de la mañana en la Ciudad del Real Madrid al salir al césped de entrenamiento a correr, e incluso tocar balón, lo que indica que la recuperación de su lesión va por buen camino, mientras que el entrenador Bernd Schuster no se dejó ver.

Las once ausencias de los internacionales de la primera plantilla del Real Madrid (Casillas, Ramos, Diarra, Sneijder, Van der Vaart, Drenthe, Pepe, Marcelo, Cannavaro, Heinze y Gago), por los partidos amistosos de las selecciones, hicieron que la jornada de trabajo fuera poco habitual.

Sólo diez jugadores del primer equipo saltaron al césped de Valdebebas. Higuaín, Salgado, Saviola, Raúl, Guti y Javi García se ejercitaron a las órdenes del preparador físico Jordi García y del recuperador Santiago Lozano. Carrera continua y estiramientos durante apenas quince minutos, antes de terminar en el gimnasio.

Mientras, Dudek completaba trabajo específico con el preparador de porteros Pedro Jaro. Por su parte Codina, que el lunes participó en el Partido de la Pobreza organizado por Zidane y Ronaldo, trabajó en las instalaciones del gimnasio.

Robben, que se lesionó el pasado 5 de noviembre en el calentamiento previo al partido de Liga de Campeones ante el Juventus de Turín, salió a correr junto a Metzelder y más tarde se atrevió incluso a tocar balón bajo la supervisión del recuperador Carlos Lalín.

Aunque no se ha acortado oficialmente el plazo para su recuperación, previsto inicialmente en cuatro a cinco semanas alejado de los terrenos de juego, todo hace indicar que va por buen camino y que antes de lo previsto podría volver a estar a disposición del entrenador.

Schuster, por su parte, se cuidó muy mucho de saltar con sus jugadores al césped para supervisar su sesión en los primeros quince minutos de trabajo, el tiempo que se permite a la prensa observar el trabajo de los jugadores, en una nueva muestra de sus ganas por no rebajar la tensión.