La sustitución del autobús atacado anoche en San Sebastián por cinco encapuchados supondrá un gasto de unos 250.000 euros, ya que el vehículo quedó totalmente calcinado, según han informado hoy a Efe fuentes municipales.

El ataque se produjo hacia las 21:05 horas en la zona de Lau Haizeta, donde cinco encapuchados detuvieron el autobús de la línea 24 que cubre el trayecto entre los barrios de Altza, Gros y El Antiguo.

Cuando el vehículo de la marca Mercedes Benz estaba llegando al barrio de Larratxo, los violentos obligaron al conductor a que lo detuviera, por lo que éste abrió rápidamente la puerta trasera para que descendieran los cinco viajeros que se encontraban en su interior.

Tras empujar al chófer, arrojaron cinco recipientes con gasolina contra el vehículo y después lo incendiaron, lo que destruyó completamente el autobús y para cuando llegaron los bomberos estaba ya calcinado.

Su sustitución por uno nuevo supondrá un coste a la compañía municipal Donostia Bus de unos 250.000 euros, según las mismas fuentes.

La presidenta del Parlamento provincial, la socialista Rafaela Romero, ha condenado hoy este ataque y ha lamentado el "tremendo susto y la violencia ejercida contra los cinco ciudadanos que utilizaban el transporte público así como contra el conductor, cuyo único delito era estar trabajando".

Romero ha denunciado que "los terroristas de la capucha y el cóctel molotov" con "lo único que contribuyen a superar la crisis económica es atacando a trabajadores y destruyendo bienes públicos" y ha puesto de relieve que ahora los donostiarras han perdido unos 250.000 euros del erario público.