El truco definitivo para que las cebollas te duren meses

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¿Quieres que las cebollas te duren semanas? ¿Has encontrado una oferta de una buena cantidad pero tienes miedo de que se te pierdan si la compras? ¿O tal vez cuando compras cebollas al par de días ya las tienes pasadas y tienes que tirar la mitad?

Para que no te suceda nada de esto, pon en práctica el truco definitivo para que las cebollas duren meses en perfecto estado. Prueba a hacerlo y ahorra dinero con ello.

Cómo conservar mejor las cebollas

Comprar cebollas

Cebollas
Cebollas/Foto: Unsplash

Antes de hablar de almacenamiento, si quieres que las cebollas que compres te duren semanas, debes adquirir ejemplares de buena calidad. Esto es lógico, porque si te haces con cebollas que están excesivamente maduras, magulladas o blandas, verás cómo se van deteriorando en poco tiempo. Así que cuando las compres, asegúrate de que no tienen golpes y de que no les haya salido ningún brote verde, o eso significará que han madurado de más.

Almacenamiento de cebollas

Cesto de cebollas
Cesto de cebollas/Foto: Pixabay

Una vez que llegues con las cebollas a casa hay que decidir dónde guardarlas. El mejor sitio para las cebollas de las variedades blancas, amarillas y rojas es el mismo. Elige un sitio bien ventilado donde no reciban los rayos de sol directo, mejor si es un lugar oscuro, como la zona más fresca de tu cocina o la despensa. El sitio ha de tener una temperatura estable. Y nunca les quites la piel.

Otro aspecto importante es recordar que no debes guardar las cebollas cerca de patatas ni de otros vegetales o acelerarán su maduración. El motivo es que las cebollas emiten gas de etileno y este lo único que conseguirá será pudrir las patatas. Y tan importante como todo lo demás: nunca guardes las cebollas en bolsas de plástico. Si eliminas estas bolsas plásticas por completo, verás cómo las cebollas se mantienen en perfecto estado durante mucho más tiempo.

Lo más adecuado es utilizar cajones de madera, recipientes de barro, bolsas de papel perforadas o bolsas de tela o de malla. Se trata de que las cebollas respiren y circule el aire evitando que se acumule humedad y que proliferen hongos y bacterias. Por el mismo motivo no debes apilarlas ni amontonarlas. Recuerda: deben estar aireadas.

Cebollas en la nevera

Si quieres que las cebollas te duren meses, ni se te ocurra guardarlas en la nevera. Si lo haces se perderán antes y verás cómo tienes que tirarlas porque se han podrido en poco tiempo desde que las compraste. Esto es así porque en la nevera se produce un ambiente húmedo que provoca que las cebollas se ablanden y que pueda salir en ellas moho.

Solo hay una excepción con la que puedes almacenar una cebolla en la nevera y es si necesitas guardar la mitad, porque no la has utilizado entera para cocinar. Para ello, introduce el trozo de cebolla en un recipiente hermético y luego introduce en el frigorífico. La mejor opción es que el recipiente sea de vidrio, puesto que un material como el plástico absorbe los olores. Otra posibilidad es envolverla en papel de aluminio.

Asimismo, si optas por meterlas en el frigorífico, nunca guardes las cebollas cortadas en un envase sin tapar o las dejes en la repisa o en la puerta de la nevera. Si lo haces, solo conseguirás que impregne de su aroma al resto de alimentos y que, con la humedad, se estropee antes. Y ten en cuenta que, una vez cortadas, las cebollas deben consumirse antes de que transcurran cuatro días.

Cebolletas

Cebolletas y zanahorias
Cebolletas y zanahorias/Foto: Unsplash

Pero también hay que considerar que es posible que compres otras variedades de cebollas como las cebollas dulces, cebollas de primavera o cebolletas. En este caso, nos encontramos ante una excepción, puesto que estas contienen una mayor cantidad de humedad que las cebollas blancas, amarillas y rojas. Por ese motivo, lo mejor es que las guardes en el frigorífico, en los cajones de la zona de las verduras. Pero para que duren todavía más, envuelve el manojo en papel de cocina.

Cómo congelar cebollas

Tienes otra posibilidad a la hora de guardar las cebollas cortadas que te sobran para que te duren más tiempo y es congelarlas. Para ello, pela la cebolla, retira la capa blanca exterior y corta el resto en trozos de pequeño tamaño. Después, colócalas en un bol y añade un poco de vinagre para evitar que se oxide. A continuación, introduce en una bolsa o recipiente especial para congelar y después ya podrás introducirlo en el congelador.

Cuando quieras utilizar la cebolla congelada, deberás ponerla a descongelar en la nevera la noche anterior, y después ya la puedes usar como si fuera fresca. Para el supuesto de que tengas prisa, coge los trozos de cebolla congelada y mételas en una taza de agua fría durante 10 minutos. Después puedes utilizarlas como desees.



Silvia Pato

Escritora y redactora gallega. Autora de los libros Las nueve piedras y El Libro del Único Camino, así como de numerosos relatos en revistas de género, colabora asiduamente con sus artículos y columnas de opinión en diversos medios digitales. Con la pasión y la curiosidad que la caracterizan, descubre el mundo a través de su historia, su cultura, sus lugares y sus gentes para difundir y compartir todo tipo de sensaciones y hallazgos. Porque todo viaje comienza con un solo paso.

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