¡Organización! Ese parece ser el grito de guerra que está movilizando a las filas de los cortometrajistas españoles. El sector, atomizado y disperso, parece haber despertado y busca 'una voz unificada', como apunta Millán Vázquez, director desde hace 10 años de la distribuidora especializada Agencia Freak. 'Queremos trascender a Indignados.org. Conseguimos su objetivo, ahora se trata de construir', explica.

Hagamos memoria. Indignados fue la plataforma de internet que catalizó la protesta por la expulsión transitoria de los cortos de la gala de los Goya el año pasado. 'De indignados queremor pasar a dignos'. O eso dice, el director de Alumbramiento, Eduardo Chapero Jackson, quien fue uno de los 20 profesionales reunidos el pasado fin de semana en Cáceres en el I Encuentro del corto español.

Organización en ciernes

'El mundo del corto está muy bien considerado fuera de España, gana premios, se vende, se conoce, pero dentro de nuestro país no funciona así', dice Vázquez. Una vez curada la herida de los Goya, creen que es hora de crear una organización que sirva para abrir un canal de comunicación. 'Todavía es un proyecto, pero hemos empezado a crear comisiones para estudiar la mejor manera de arrancar'.

Con esto, y con la prometida comisión del corto dentro de la Academia del Cine -con la que se pretende mejorar el criticado proceso de selección de nominados a las categorías de mejor cortometraje de los Goya- el sector se ha puesto en movimiento.

Pero, esta semana se acorta por otras razones. Hoy arranca un ciclo en el Reina Sofía que abre la puerta del museo a una selección de cortometrajes españoles hechos desde el cine -y no desde el mundo del videoarte como suele ser natural en los centros de arte-. Ayer arrancó también una de las plataformas más sólidas a nivel nacional, la Semana del Cortometraje de la Comunidad de Madrid -responsable de la plataforma de difusión Madrid en Corto-, que cumple 10 años y donde se impartirán talleres a cargo de Jaime Rosales, Eduardo Chapero Jackson o Koldo Serra.

Óscar de Julián, director del festival Almería en Corto y programador del ciclo del Reina Sofía, opina que uno de los principales retos del sector es la distribución y que las televisiones públicas abran más espacios para la exhibición de cortos. Con un interlocutor del sector en ciernes, tal vez, las cosas empiecen a cambiar. Y si no habrá que aprender de Guillermo Zapata, el español que con su corto Lo que tu quieras oir ha llegado a ser el tercer vídeo más visto en Youtube , con 60 millones de visitas. Si la tele dice no y los cines también, internet anda al acecho.

Daniel Sánchez Arévalo: «El corto tiene entidad propia» 

1. ¿Ha servido de algo la polémica generada por los Goya?

Ha servido para reivindicar al cortometraje dentro de la industria. Ahora bien, ha llegado el momento de dejar de quejarse y trabajar para, entre otras cosas, mejorar el proceso de selección de los nominados a mejor cortometraje en los Goya. Lo importante es la calidad y no tanto la cantidad de gente que ve tu corto.

2. La costumbre es que el corto sea la pista de entrenamiento para los largos. Sin embargo, no ha dejado de hacer cortos después de tu primer largo...

Cuando me pongo a escribir una historia no sé si va a ser un corto o un largo. Me pasó con Traumalogía –premiado a la mejor dirección en el festival Cortogenia, entre otros–. Me salieron 20 páginas y se quedó en un corto. Lo importante es ser honesto con la medida que tiene cada historia.Cuando debuté en el largo con Azuloscurocasinegro, no era novel, ya había hecho 14 películas.

3. ¿Qué te aporta el corto a diferencia del largometraje?

Para mí, son dos formatos independientes, el corto tiene entidad en sí mismo. Es mucho más libre y te permite probar y experimentar mucho más allá que los largos.