Este artículo se publicó hace 11 años.
La series que llegaron del frío
Las cadenas estadounidenses ponen el talento local al servicio de la corriente nórdica. El último ejemplo es 'The Bridge', que se inspira en la sueco-danesa 'Bron'
Las cuestiones políticas y sociales de un pequeño grupo de países del norte de Europa continúan atrapando el interés y el talento globales a través de sus series televisivas , que tras éxitos como The Killing o Millenium inspiran ahora grandes producciones estadounidenses del estilo de The Bridge.
Un cuerpo partido por la mitad abandonado a ambos lados de una frontera es la perturbadora imagen con la que arranca la serie sueco-danesa Bron, en la que un policía de cada país encabeza el grupo destinado a resolver el crimen.
La idea ha sido acogida y trasladada a la frontera méxico-estadounidense, entre El Paso y Ciudad Juárez, en The Bridge, que Fox estrena estos días en 120 países de América Latina, Europa, Asia, Oriente Medio y África, y que podría tener otra versión europea con el Eurotúnel entre Francia y Gran Bretaña como escenario, según el proyecto de Canal+ y Sky.
Como ocurrió con The Killing, basada en la danesa Forbrydelsen, las grandes cadenas estadounidenses ponen el talento local al servicio de esta corriente nórdica, y en The Brigde Meredith Stiehm, responsable, entre otras, de la aclamada Homeland, y Elwood Reid (Caso abierto) se han encargado de elaborar los guiones.
No obstante, los seriéfilos del mundo, unidos por las grandes posibilidades de internet, han preferido hasta ahora las producciones originales, en las que prima, además de potentes historias, una lograda ambientación y un gran trabajo actoral. Muchos de sus protagonistas provienen del teatro, como ocurre en Gran Bretaña, que no por casualidad es el país donde primero se descubrió este filón nórdico.
En el caso de The Bridge, el peso de la interpretación se ha encomendado a dos figuras curtidas en el cine, la alemana Diane Kruger (Malditos bastardos) y el mexicano Demián Bichir, candidato al Óscar en 2011 por Una vida mejor; la tensión dramática también está asegurada, dado que la ficción transcurre en Ciudad Juárez, donde han sido asesinadas más de 700 jóvenes en poco más de 20 años.
Pero no sólo de tramas policíacas vive la ficción nórdica. La producción Borgen, emitida por la BBC y de la que la NBC preparó un piloto, se mete de lleno en la realidad política de Dinamarca a través del personaje de Birgitte Nyborg. Esta da vida a una madre de familia que lidera un pequeño partido político y que acaba convertida en la presidenta del país por los dislates de las grandes formaciones políticas. Y muchos sitúan a la comedia danesa Klovn (Payaso), en la génesis de producciones estadounidenses como las que protagoniza Larry David, el creador de la mítica Seinfeld, en las que el humor más corrosivo sirve para analizar la sociedad occidental.
Noruega ha exportado también su particular estilo con Varg Veum (que emite La 2), la historia de un detective privado basada en la obra del escritor Gunnar Staalesen, uno de los últimos bestseller de la pujante narrativa nórdica, cuyos vasos comunicantes con la televisión tiene ilustres precedentes en Wallander y Millennium, series que han seguido la estela de éxito de los novelistas suecos Henning Mankel y Stieg Larsson.
Precisamente, el director de Millennium, el danés Niels Arden Oplev, ha sido el encargado del episodio piloto de la serie de la CBS Under the Dome, basada en la novela homónima de Stephen King y que figura hasta ahora como mejor estreno de la televisión estadounidense en esta temporada.
La última adaptación confirmada de esta corriente nórdica es la de Those Who Kill, basada en la danesa Den som draeber, que relata el trabajo de una división especial de policía especializada en asesinos en serie, y cuyo capítulo piloto para la cadena estadounidense A & E ha corrido a cargo del guionista Glen Morgan (Expediente X).
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