Público
Público

"El Barça es el enemigo común de Madrid y Espanyol, pero nada más"

Con la baja de De la Peña y los problemas físicos de Tamudo, Riera se convierte en una de las grandes referencias de un Espanyol que visita hoy el Bernabéu

N. ROMÁN / A. MARTÍN

Albert Riera, espigado y hablador, se ha convertido en uno de los futbolistas de moda de este país. Después de una carrera pintoresca, en que se dio a conocer en el Mallorca y pasó sin pena ni gloria por el Girondins de Burdeos, el Espanyol y el Manchester City, de la mano de Valverde se ha convertido en uno de los mejores extremos zurdos de España y tiene muchos números para estar en la Eurocopa. A sus 25 años, sus actuaciones han despertado el interés del Real Madrid, equipo al que amenaza hoy con un Espanyol que busca la Liga de Campeones.

El Espanyol puede ser otra vez decisivo para la Liga.

Queda mucho, pero si ganamos en el Bernabéu dirán que hemos sido el juez. Llegamos en nuestro mejor momento porque acabamos de hacer los 42 puntos, que es lo que queríamos en agosto, estar salvados cuanto antes. Y tenemos 11 jornadas por delante para buscar la Liga de Campeones.

Ganando se quitarían de una vez por todas la fama de madridistas.

Se dice eso por lo que pasó el año pasado, porque es imposible ser al mismo tiempo del Espanyol y del Barça, y porque tenemos un enemigo común. Pero nada más.

Parece el momento idóneo para enfrentarse a ellos.

Para nosotros el Madrid siempre llega en el mejor momento. Es el mejor día para decir que queremos la Liga de Campeones.

¿Se les está haciendo larga la Liga?

Es complicado, son muchas jornadas. A veces hay desconexiones, no es un problema de actitud. Si les ha pasado al Barça y al Madrid, puede pasarnos a nosotros. Pero que nadie olvide que en la primera vuelta estuvimos 17 partidos sin perder y fuimos terceros.

¿Les preocupa, con sus últimos problemas defensivos, enfrentarse a Robinho o Raúl?

Con este entrenador nunca hemos entrenado en función de los rivales. Jugando bien les podemos ganar como ya hicimos en casa.

Al Real Madrid le llegan los problemas por su banda derecha, y además no está Ramos.

Cada partido es un mundo. Firmo ganar con goles que llegan desde el otro lado. La baja de Ramos les afectará mucho.

Usted sonó como refuerzo del Real Madrid. ¿Es el Bernabéu un escaparate?

Cada semana es un escaparate, pero contra el Madrid, en ese escenario, por supuesto que lo quieres hacer bien.

¿Se ha planteado cambiar de equipo para crecer más?

Cuando sienta que no progreso, pues sí, pero yo estoy muy a gusto aquí. El año que viene queremos estar en Europa, estrenaremos el campo nuevo... Eso colma mis expectativas.

Le costó lo suyo alcanzar este nivel.

Estuve en Francia, volví en mi primera etapa al Espanyol, me cedieron al Manchester City... Eso fue decisivo para mi carrera, porque te hace abrir los ojos y ser autocrítico, preguntarte por qué no juegas.

Usted quiso seguir en Manchester.

Sí, pero entonces llegaron Valverde y Paco Herrera. Tenía esa espina clavada de que no quería que se me recordara como lo que pudo ser y no fue, sino como un buen jugador. Pero siempre he dicho que me gustaría volver a Inglaterra.

¿Qué cambió en lo futbolístico?

Los jugadores de banda a veces sólo buscamos el gol o la asistencia, pero aprendí que hay muchas otras cosas. Ahí se ve al buen entrenador. Hay que saltar de cabeza, buscar a los compañeros, hacer jugar al equipo, crear espacios...

¿Se aprenden jugando con De la Peña y Tamudo?

Por supuesto. Siempre he dicho que es mucho más fácil jugar en Primera que en Segunda B o Tercera. Cuando ya había debutado en Primera y me tocaba ir con el filial, las pasaba putas para ser titular porque es otro tipo de fútbol.

¿Le cambió el convertirse en el jugador de moda?

No soy Beckham, no necesito guardaespaldas (se ríe). Pero no cambiaría por nada del mundo. Me gusta hacer las mismas cosas... Y si cambiara, mi madre me mataría.

¿Piensa en la Eurocopa?

Sé que si estoy a mi nivel, voy a estar. Trabajo cada día a tope para ello.

Su convocatoria estaba cantada.

Bueno, los seleccionadores tienen sus gustos. Es complicado ese puesto, porque si llevas a uno tienes que quitar a otro.

Como con el caso de Raúl y Tamudo.

Exacto. Ambos son muy importantes en sus equipos. Con Tamudo, la selección gana en gol. Y Raúl, que ha jugado con todos los entrenadores que ha tenido, es muy importante por su liderazgo. No me gustaría estar en la piel del entrenador, pero creo que debemos ser muy optimistas, no se puede llegar mejor. Tenemos mejores expectativas que nunca.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?