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"A Benzema se le mete demasiada presión"

Negredo, delantero del Sevilla, producto de la cantera del Real Madrid

ALBERTO CABELLO

Un nueve que sigue vestido de blanco, pero lejos del Bernabéu. Álvaro Negredo (Madrid, 1985) es uno de tantos productos de la cantera madridista que no tuvo hueco en la primera plantilla. Después de una temporada gris que le apartó del Mundial de Suráfrica, el delantero vallecano empieza a ganarse un hueco entre la mítica pareja goleadora sevillista formada por Luis Fabiano y Kanouté.

Tantos años en la cantera del Real Madrid deben de marcar a fuego. ¿Señala en rojo cada enfrentamiento con el equipo que le formó como futbolista?

Bueno, ahora las cosas van cambiando un poco con el paso del tiempo. El aliciente es por el rival, por la competición. Ya no tanto por mi pasado en esa casa. El partido tiene una importancia capital. Nos jugamos mucho, pero el pasado ya queda un poco lejos.

¿Qué opina un nueve que no tuvo oportunidad en el Bernabéu de toda esta movida sobre la búsqueda de un delantero?

Los veo escasos de delanteros centro. Es cierto que Cristiano Ronaldo puede jugar en esa demarcación, pero faltan jugadores específicos que trabajen dentro del área. La baja de Higuaín es muy importante.

Y Bezema en el centro de la diana. Se duda de si es el goleador que necesita el Madrid.

A Benzema se le está exigiendo demasiado, se le ha metido mucha presión. Es un buen futbolista y con confianza creo que lo podrá demostrar.

'Este año estoy más centrado; ya no me como tanto la cabeza'Seguro que durante todos estos días ha recibido mensajes desde la capital sobre la posibilidad de que usted tuviera en estas circunstancias minutos con Mourinho.

Bueno, todo eso ha quedado a nivel más íntimo, de amigos. Es cierto que algún comentario ha habido. Desde luego, nadie del mundo del fútbol me ha hecho ninguna insinuación en ese sentido.

¿Qué puede contar de lo que llevamos de temporada? Este año se le nota mucho menos ofuscado.

Sí, estoy más suelto, más a gusto y contento. Las cosas me están saliendo mejor que el año pasado. Esto es una cadena, si al equipo le van llegando los resultados, es mucho más sencillo que la individualidad destaque. Me siento más integrado. Creo que la gente está contenta conmigo y eso te da tranquilidad.

El cambio debió de ser brusco. Usted era el alfa y el omega en su etapa en el Almería. Ahora tiene que repartirse los minutos y la referencia con Luis Fabiano y Kanouté.

Sí que cuesta. El futbolista se acostumbra muy pronto a jugarlo todo. Eso nunca cansa ni molesta. Te sientes importante, el jugador referencia. Aquí todo es muy distinto. Tienes que competir con jugadores como Luis Fabiano y Kanouté. Y no sólo competir. Debes entender que el equipo ya no juega para ti, que hay otros dos grandes delanteros que también son referencia. He aprendido a tener un poco de perspectiva. Es cierto que no tengo los minutos que en el Almería, pero aquí hay más partidos.

'Con su juego estas semanas, Romaric ha tapado muchas bocas'¿Qué ha aprendido de la temporada pasada, de los reproches y las bromas de la grada?

Estoy más tranquilo, más centrado. He aprendido a no comerme tanto la cabeza. Soy un delantero, no una máquina. Estar perfecto todos los domingos es imposible. Tendré partidos mejores y partidos peores. Noches en las que marcaré y otras en las que no. Pase lo que pase siempre debo salir satisfecho del campo por mi esfuerzo y entrega.

¿Le pudo la presión de tener tanto foco encima en esa disputa con Llorente por un puesto en la selección?

No, para nada. No me presionó. Era un premio. No creo que pelear por un puesto entre los 23 para Suráfrica fuera una de las razones de que la temporada pasada no salieran las cosas de la manera que me hubiera gustado.

Ve puerta con facilidad y muchos de sus goles vienen de la misma bota, la de Romaric.

Es un jugador que ha cogido el peso del centro del campo del equipo. Tiene una calidad tremenda para percibir tu desmarque y colocarte el pase a la bota.

Es un futbolista especial. Como a usted, también le ha costado ganarse a la afición.

Tiene una calidad tremenda. Una visión de fútbol especial. Cuando está bien, es de lo mejor que tenemos en la plantilla. Es un gran tipo. Muy bromista, pero también comprometido con el grupo. Ni una cosa ni otra están reñidas. Creo que su rendimiento durante estas últimas semanas ha servido para tapar algunas bocas.

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