La Junta Directiva de la Real Federación Española de Tenis (RFET) ha elegido, después de casi tres horas de reunión, a Madrid como sede de la eliminatoria de semifinales del Grupo Mundial de la Copa Davis ante Estados Unidos del próximo mes de septiembre, además de asegurar la continuidad en el cargo del capitán español, Emilio Sánchez Vicario.

El presidente de la RFET, Pedro Muñoz, explicó que, por primera vez en la historia del tenis español, la elección se tomó después de una votación secreta en la que Madrid obtuvo 9 votos, Benidorm, 4, Gijón, 2, Tenerife, 1 y hubo una abstención, que fue la del propio presidente. 'Ha sido muy difícil tomar esta decisión final, pero nos sentimos orgullosos al sentir que todo el país está detrás de este grupo de tenistas', aseveró Muñoz.

Además, el máximo mandatario de la RFET negó la influencia de la candidatura de la capital española a los Juegos Olímpicos de 2016. 'No hemos hablado de Madrid 2016. Es un hecho más que Madrid 2016 sea patrocinador porque a la hora de evaluar no ha sido factor', insistió el dirigente contando con el apoyo de toda su junta directiva.

'El factor deportivo ha contado para elegir Madrid. Pero no ha contado de la manera definitiva que yo hubiera querido. Y es que ha de contar área deportiva, económica, social, y otros factores', dijo Muñoz, que facilitó el dato de que Gijón obtuvo más votos en el área técnica. 'Estamos todos orgullosos y el primero yo. A mí, esta votación me da ese respaldo', espetó.

Al margen de la elección de la sede, Pedro Muñoz ratificó a Emilio Sánchez Vicario como capitán español y mostró su apoyo al tenis nacional por el momento 'complicado que está viviendo en el Líbano'. 'En este momento el seleccionador está en su sitio. Emilio Sánchez Vicario es el seleccionador del equipo español. Estos cargos nunca son eternos, pero no va a haber un cese por eso', explicó Muñoz. No obstante comentó que se reunirá con él para aclarar algunos aspectos.

'Hablaré con Emilio porque hay una mano tendida que es parte de nuestro proyecto. Tengo que hablar para que cada uno tenga su campo. Pero que tenga que hablar con él no quiere decir que hablemos de su cese', apuntó. 'Todos pretendemos que dirija a España, esa es nuestra intención. Pero también queremos que la institución tenga el respeto que debe de tener. Queremos un estilo de mano tendida y de generosidad, que yo no me quiero saltar', agregó.

Por otro lado, Muñoz recordó su promesa, cuando España se deshizo de Alemania en cuartos de final en Bremen, que la sede de las 'semis' ante Estados Unidos la eligirían los jugadores. 'En Bremen cometí un acto de alegría, porque el corazón me hizo una mala pasada. Les dije que jugaríamos donde quisieran, pero pronto pedí disculpas y dije que no podría cumplir ese compromiso', añadió.

'Pero igual que se ha dado eco a cosas que podían manchar mi nombre, el de la RFET y el del tenis español, hoy quiero que se resalte la limpieza de la democracia, de esta votación que ha elegido a Madrid como sede', manifestó Muñoz, que aseguró que terminaron la reunión 'como hermanos y siendo felices'.

Por otro lado, Muñoz, que no se plantea que los jugadores se nieguen a jugar, tampoco concibe la división del tenis nacional. 'No me podría plantear que en el centenario del tenis español estuviéramos divididos', terminó el presidente de la RFET, que añadió que ayer mantuvieron una reunión hasta las cinco de la mañana para discutir estos aspectos.