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Entrevista al secretario de Estado de Derechos Sociales Nacho Álvarez: "El ingreso mínimo es incuestionable. Nadie debe necesitar hacer cola para pedir alimentos"

El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ
El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ
ALEJANDRO López de miguel / Fotos: Fernando Sánchez *

Nacho Álvarez (Madrid, 1977) es secretario de Estado de Derechos Sociales, pero también el cerebro económico de Podemos, responsable último de sus números. Recibe a Público en la sede de la Vicepresidencia de Derechos Sociales y Agenda 2030 el miércoles, apenas 48 horas antes de que el vicepresidente Pablo Iglesias y el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luís Escrivá, hagan públicos los detalles del ingreso mínimo vital. Posiblemente sea la medida social de mayor calado dentro del acuerdo de coalición, cuya aprobación -en Consejo de Ministros extraordinario, este viernes- se ha visto acelerada por la pandemia del coronavirus. "Nos faltaba una prestación de último recurso, una red asistencial capaz de captar todos aquellos casos que se han ido quedando fuera de los ERTE o de los subsidios por desempleo", asegura.

El ingreso mínimo vital, una de las medidas estrella del Gobierno de coalición, verá la luz este viernes. ¿Está satisfecho con cómo ha quedado? El CIS dice que  cerca del 80% de los españoles están a favor de esta prestación, cuando hace escasos meses o años, cuando la propuso inicialmente Unidas Podemos, parecía una utopía. ¿Cómo hemos llegado hasta aquí?

Efectivamente, hace años, cuando la propusimos por primera vez, parecía una utopía, y sin embargo esta semana va a hacerse realidad una medida histórica. Será la medida de mayor capacidad redistributiva de nuestro sistema de política social, lógicamente nos sentimos orgullosos. Pero no es un orgullo únicamente para Unidas Podemos, para un Gobierno de coalición progresista, sino que tiene que ser un orgullo para la sociedad española. Permite equipararnos un poco más a los estándares europeos, dejar de ser uno de los pocos países de la UE que carece de un sistema de rentas mínimas digno de tal nombre.

¿Cómo ha sido el día a día con el Ministerio de Escrivá? La medida la han desarrollado entre la Vicepresidencia y el Ministerio de Seguridad Social, y ya hubo tensiones en su día a cuenta del ingreso vital puente que propuso Unidas Podemos, hasta que llegara el definitivo, y al final optaron por acelerar su implementación definitiva. ¿Dónde se han dejado ver estas tensiones y cómo han llegado a este entendimiento?

"El ingreso mínimo no es un orgullo únicamente para Unidas Podemos y para el Gobierno; tiene que serlo también para la sociedad española"

Como cualquier negociación dentro del Gobierno, ha sido un trabajo intenso. En este caso ha sido un trabajo fructífero, fluido. Hemos sido capaces de ir, poco a poco, armando y alumbrando una prestación que, insisto, va a tener una dimensión histórica. Desde hace 15 años, desde la aprobación de la ley de dependencia, no tenemos en España el desarrollo de una medida de política social de esta dimensión.

Unas 850.000 hogares van a percibir entre 460 y 1.100 euros mensuales, dependiendo de criterios como los hijos a cargo, si son hogares monoparentales... ¿qué umbral de renta deberán tener para acceder?

Fundamentalmente es una prestación que viene a constituir un suelo. España ya tenía diversos sistemas de rentas mínimas en las comunidades autónomas, pero eran muy desiguales. Esta prestación pretende ser un suelo para todos los españoles, vivan donde vivan: para un extremeño, para un guipuzcoano… pretende terminar con la pobreza extrema en este país, garantizando un determinado umbral de rentas, que después podrá ser complementado por las comunidades autónomas, con sus respectivas rentas mínimas.

¿De qué umbral hablamos?

Son cifras conocidas, el ministro Escrivá ya las ha ido planteando. Estamos hablando de que, a partir de un nivel similar al de las pensiones no contributivas, cerca de 460 euros, se garantizará ese mínimo para todos los hogares que carezcan de este nivel de renta.

El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ
El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ

El ministro Escrivá dijo que será obligatorio acreditar estar buscando activamente empleo para poder acceder. ¿Cómo se va a certificar esto? Recientemente usted comentó que se iban a eliminar trabas burocráticas ¿Cómo se va a acreditar la búsqueda de empleo y dónde se reducirá la burocracia?

"El ingreso mínimo va a estar acompañado de todo un desarrollo legislativo que concrete y concentre estos incentivos al empleo"

Va a tener pocos requisitos de acceso desde el punto de vista burocrático, el fundamental será el nivel de renta. Se exigirá que las personas que pidan esta prestación estén inscritas también como demandantes de empleo, pero tiene que quedar claro que no se les va a exigir que sigan un itinerario laboral o social, porque esto es competencia de las comunidades autónomas, y serán las comunidades las que decidan.

En cualquier caso, la prestación va a contar con un incentivo fuerte al empleo. El ingreso mínimo, igual que pasa con otros sistemas de rentas mínimas de las comunidades, como el caso vasco o el navarro, va a ser compatible con otros ingresos económicos, en particular con ingresos laborales, de forma que no desincentivemos en ningún caso la búsqueda de empleo.

Esto ya funciona en otros sistemas de rentas mínimas europeos, se han ido adaptando para evitar la trampa de la pobreza. La idea es evitar que, cuando en un hogar beneficiario de esta prestación, uno de sus miembros encuentre un empleo, no pierda el 100% del ingreso mínimo, porque eso desincentivaría en algunos casos que se dé el paso a esa situación de empleo. El ingreso mínimo estará acompañado de todo un desarrollo legislativo que concrete y concentre estos incentivos al empleo.

¿Cuándo darán a conocer esos incentivos al empleo? ¿En junio?

Va a ser muy inmediato a la aprobación del ingreso mínimo vital, exacto. Diría que será un desarrollo casi en paralelo, el de los incentivos al empleo y el del ingreso mínimo.

Esta semana hablaban de que llegará a 850.000 hogares en una primera etapa, hace unos días calculaban un millón. ¿Qué ha pasado para bajar de un millón a 850.000? ¿A cuántos hogares espera llegar en total, y cuándo estará a pleno rendimiento?

"El objetivo es que, conforme avance la recuperación económica, el número de hogares que necesiten el ingreso mínimo no sea tan alto"

Hay que distinguir la puesta en marcha de una prestación de su desarrollo progresivo. Lo que tenemos son estimaciones, que oscilan entre los 800.000 hogares y el millón, para su puesta en marcha en los primeros meses, pero después podrá ir ampliándose a más hogares o, esperemos, podrá ir reduciéndose.

El objetivo de este Gobierno es que, a medida que lo permita la recuperación económica, el número de hogares que necesiten esta prestación no sea tan alto, porque la creación de empleo y la mejora de la calidad del empleo evite que tengamos situaciones de pobreza extrema o de compatibilidad de ingresos laborales con pobreza, que es una realidad que hemos visto en los últimos años. Fruto de las reformas laborales de la última década, el empleo ya no es un pasaporte de ciudadanía, a veces es compatible con salarios muy malos. Esperamos que, poco a poco, esta prestación deje de ser necesaria, o sea necesaria para el menor número de hogares posible.

Parece complicado que se reduzca el número de solicitantes a corto plazo: los ERTE llevan la obligación de no despedir en seis meses, el paro rondará el 19% a finales de año... con estos números, parece que en los primeros meses o años de vida de esta prestación irá creciendo el número de hogares que la soliciten. ¿Hasta cuándo? ¿Cuándo va a llegar el pico de máximo de hogares que lo reciban, para que luego se pueda reducir?

"Esperemos que el pico de solicitantes llegue en los próximos seis meses"

Esperemos que el pico llegue en los próximos seis meses. La prestación está diseñada como un último recurso. Va a ser muy necesaria en los próximos meses, y esperemos que en los meses o años posteriores la necesidad se vaya reduciendo. En las últimas semanas, el Gobierno ha desarrollado lo que hemos denominado un escudo social: se han puesto en marcha Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) muy ambiciosos, para proteger la renta de los hogares y la propia liquidez de las empresas; nuevos subsidios por desempleo, incluso para personas que carecían del tiempo cotizado… sin embargo, nos faltaba una prestación de último recurso, una red asistencial capaz de captar todos aquellos casos que se han ido quedando fuera de los ERTE o de los subsidios por desempleo. Éste es el sentido del IMV.

Ha mencionado la reforma laboral. En calidad de responsable de políticas económicas de Podemos, ¿cuándo se debe derogar la reforma laboral y de qué modo? ¿Por dónde hay que empezar? Más allá de las polémicas.

La reforma laboral ya se está derogando. Este Gobierno ya ha iniciado aspectos de su derogación muy importantes, como vimos hace algunas semanas, con la derogación del despido en situaciones de baja médica.

¿Y cuándo va a concluir esta derogación?

"El Gobierno se comprometió a la derogación de la reforma laboral en el marco del diálogo social. Demos tiempo a Yolanda Díaz"

Hay que dejar que Yolanda Díaz, la ministra de Trabajo, siga pilotando este proceso de derogación, en el marco del diálogo social. El Gobierno se ha comprometido claramente a esta derogación y superación del marco de relaciones laborales que estableció la reforma del PP, y Yolanda Díaz está haciendo un trabajo estupendo en este sentido. Hay que darle tiempo a este trabajo.

Las derechas han pasado de criticar el ingreso mínimo, de llamarlo despectivamente "paguita", a comulgar o, al menos, a no demonizarlo. ¿Qué lee en esto? 

La derecha ha elegido un mal camino. Ha elegido el camino de derribar un Gobierno en mitad de una crisis, a costa de lo que haga falta. Incluso hasta el punto de llamar "paguita" a una medida que ya existe en Francia, en Reino Unido, en buena parte de los países nórdicos y en otros países europeos, y que desde luego no tiene ningún carácter bolivariano ni ningún carácter clientelar. En definitiva, es una propuesta de política social que garantice el bienestar al conjunto de los hogares y de los españoles. Por lo tanto, si se han dado cuenta de su error y están dispuestos a rectificar, bienvenidos sean.

Hablando de errores, el Gobierno no se ha salido del reconocimiento genérico de que los ha cometido. Díaz se disculpó en su día por el retraso a la hora de publicar en el BOE el permiso retribuido recuperable, Iglesias hizo lo propio...  ¿Dónde ha habido errores concretos?

"La derecha ha elegido un mal camino. Ha elegido el camino de derribar un Gobierno en mitad de una crisis, a costa de lo que haga falta"

Si uno mira la prensa internacional se da cuenta de que éste, pero también otros gobiernos, sometidos a las urgencias y las tensiones de una crisis como la que estamos viviendo, tenemos que tomar muchas decisiones en un espacio muy corto de tiempo, y por tanto es normal que se cometan errores. Este Gobierno no ha estado exento de ellos, así ha sido y así se ha reconocido cuando ha sucedido. Me parece que una decisión como la de permitir los paseos de los niños, que era una decisión correcta, efectivamente fue mal comunicada, el vicepresidente pidió disculpas por ello. Cuando se comete un error, como cometimos en aquella ocasión, lo que corresponde es pedir disculpas.

Han tenido que revisar las prestaciones similares a nivel autonómico. ¿Qué han visto? ¿Qué datos hay que permitan afirmar que estas rentas funcionan? 

El sistema de rentas mínimas que hasta ahora hemos tenido en España, únicamente en manos de las comunidades autónomas, sin una prestación estatal que unificara, ha sido un sistema casi como un queso de gruyere. Tiene muchos agujeros, y hay prestaciones con mejor calidad y cuantía, y otras con una cobertura muy pobre.

¿Un ejemplo de esas comunidades donde funcionan mejor?

El caso vasco es notorio, hace más de dos décadas que tienen una prestación muy notable. El ingreso mínimo vital viene a plantear la necesidad de extender un modelo más unificado y más acorde a las necesidades de este siglo al conjunto de las comunidades, a establecer que cada español tiene el derecho a disponer de un mínimo, que después podrá ser mejorado o complementado por la comunidades.

Se ha hablado de previsiones de deuda o de paro. ¿Qué indicadores manejan sobre pobreza y desigualdad durante la pandemia? ¿Cómo se refleja el hecho de que no se vive igual en los municipios y barrios más ricos y en aquellos más humildes?

El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ
El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ

Esto es una evidencia. Esta crisis ha sido un reto económico crucial, porque de alguna forma ha sido autoinducida. Para proteger la salud de las personas hemos tenido que confinar la economía, congelarla, y ahora tenemos el reto de ir descongelándola poco a poco, en la medida en que la situación epidemiológica lo permita.

Esto se está traduciendo en un impacto sobre el empleo, y como consecuencia, en un impacto sobre la renta de los hogares. Hace diez años sufrimos recortes, en esta ocasión hay nuevas prestaciones, nuevos subsidios y el IMV, un hito histórico en la construcción del cuarto pilar del Estado del bienestar.

¿Hay algún indicador nuevo? La derecha ha estado utilizando todo esto para plantear que ustedes quieren construir una suerte de dictadura bolivariana, pero habrá indicadores que muestren que la incidencia de la pandemia entre los más humildes está siendo devastadora, y de ahí estas políticas.

"Esta administración no se puede permitir que haya personas que tengan que ir a asociaciones de vecinos a pedir comida"

Las imágenes que hemos tenido estas últimas semanas sobre las llamadas colas del hambre son muy evidentes. Esta administración no se puede permitir que haya personas, que, por verse excluidas de los ERTE, por no haber podido acceder a subsidios por desempleo, lleguen a una situación en la que tengan que ir a asociaciones de vecinos a pedir comida. Creo que el ingreso mínimo vital es urgente, y debe ser además incuestionable precisamente por eso, porque tenemos que garantizar que, en un momento como este, ningún compatriota tiene la necesidad de tener que ir a ponerse en una cola para pedir alimentos por no poder llegar a fin de mes.

Hace unas semanas el vicepresidente Iglesias anunció que, junto a Italia y a Portugal, España defendería ante Bruselas la creación de un IMV europeo. ¿Se han añadido nuevos países? ¿En qué estado se encuentra esta propuesta?

Es una propuesta lanzada para el debate, en un momento en que tenemos grandes debates abiertos en Europa. Cómo le damos a la crisis una respuesta que sea auténticamente europea, a diferencia de la respuesta que tuvimos hace una década, que básicamente fue un sálvese quien pueda. En este momento Europa está ante un reto de supervivencia política. Si volvemos a darle la misma respuesta a la crisis, serán millones de personas las que no crean en Europa durante los próximos años. Esta suerte de renta mínima europea se suma a propuestas que ya existían y eran muy útiles, como un subsidio por desempleo paneuropeo. En todo caso, pensamos que ha de contar con un fondo de reconstrucción que permita que sean las propias instituciones europeas las que emitan deuda, que pueda ser trasladada en forma de transferencia a los países que tienen una situación más acuciante por la crisis del covid.

Este miércoles Bruselas desvelará su plan de actuación ante la pandemia. ¿Qué es lo que espera exactamente España? ¿Va a haber ese desembarco de los hombres de negro, como hubo en su día con el rescate que siempre negó Mariano Rajoy? ¿Qué tipo de ataduras esperan, y qué volumen de ayudas?

"Lo que necesitamos es un marco de reconstrucción, con transferencias desde instituciones europeas. Por ejemplo, con la emisión de coronabonos"

Nadie en su sano juicio puede pensar que vamos a volver a plantear políticas de austeridad y recortes como las que se plantearon hace una década. Demostraron un enorme fracaso, llevaron a Europa a un colapso no sólo económico, sino también social y político. Diría que esa es una vía muerta, un camino intransitable desde el punto de vista económico y social, pero también político.

Lo que corresponde ahora es pensar en una nueva respuesta. Esto exige desde luego un fondo de reconstrucción, sin pensar que la salida vuelva a pasar por los préstamos condicionados a la aplicación de una serie de reformas estructurales que mermen derechos sociales o laborales.

El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ
El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ

Lo que necesitamos es un marco de reconstrucción, con transferencias desde instituciones europeas. Desde instituciones que sean capaces de responder de forma distinta a esta crisis, por ejemplo, con la emisión de coronabonos o de algún tipo de emisiones de deuda que sean avaladas por las propias instituciones europeas.

Al hilo de esta cuestión, ¿se ha llegado a explorar la construcción de un posible bloque del sur, para poder responder a este desafío? Hemos visto las tendencias de Holanda y Alemania, han sido muy críticos.

Más que explorar alineamientos específicos entre norte y sur, lo que estamos viendo es la reconfiguración de las posiciones tradicionales. La propuesta que hicieron Francia y Alemania hace apenas unas semanas va en una dirección muy satisfactoria. Pensamos que la dimensión del fondo planteado es todavía escasa pero, en todo caso, camina en la buena dirección, y supone un realineamiento en las posiciones tradicionales, no sólo interesante, sino deseable.

Según las estimaciones del Gobierno el IMV costará unos 3.000 millones de euros. Teniendo en cuenta que la caída esperada del PIB es de más del 9%, ¿de dónde van a salir este dinero?

"Esto remite a la necesaria reforma tributaria de la que hace años venimos hablando, y sobre la que todavía tenemos pocos visos"

A nadie se le escapa: todos los países europeos, todos los países de la OCDE, también Estados Unidos, todos van a tener un fuerte déficit público como consecuencia de una situación en la que se hunde la recaudación y aumentan gastos que son cruciales para proteger a la población, a las empresas, y para mantener nuestro tejido productivo y empresarial intacto en este momento. Ojo, tanto la Reserva Federal de EEUU como el Banco Central Europeo (BCE) ya han insistido y anunciado que van a proteger, van a defender y a garantizar que no produzca convulsiones en los mercados financieros. Más allá del debate a corto, en el caso de España creo que esto remite a la necesaria reforma tributaria de la que hace años venimos hablando, y sobre la que todavía tenemos pocos visos.

El presidente del Gobierno no ha visto con muy buenos ojos, tampoco la ministra de Hacienda, la propuesta de UP sobre un impuesto a las grandes fortunas. ¿Lo van a luchar únicamente en la comisión de reconstrucción del Congreso? ¿Van a seguir defendiéndolo desde el Gobierno?

"En España, el 55% de la riqueza está en manos del 10% de la población más rica. En los próximos años necesitaremos un impuesto de patrimonio que lo corrija"

El impuesto a las grandes fortunas es parte de un todo. Es parte de una reforma fiscal integral que garantice a España la capacidad tributaria suficiente como para hacer frente a las necesidades de la reconstrucción económica y social que tenemos por delante, pero que al mismo tiempo garantice una mayor homogeneidad y un mayor acercamiento a Europa.

Vamos a tener que debatir cómo acercamos la tributación de las rentas del trabajo y las del capital. En este país las rentas del trabajo tributan de media al doble de lo que tributan las rentas del capital. Necesitamos una revisión en su conjunto que nos acerque a Europa, que modernice algunas figuras tributarias que son grandes privilegios de grupos sociales y empresariales con más capacidad económica que otros.

En nuestro país, los ingresos públicos con relación al PIB están siete puntos por debajo de la media europea. Esto supone todos los años una recaudación de 80.000 millones de euros por debajo de la de nuestros socios, y esto es una parte de una propuesta que trata de corregir las necesidades de financiación que tenemos, pero también las necesidades de mayor equidad social. En España, el 55% de la riqueza está en manos del 10% de la población más rica. En los próximos años vamos a necesitar algún tipo de impuesto de patrimonio que vaya corrigiendo esta desigualdad, igual que se está planteando en otros países de la OCDE.

El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ
El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ

Con este impuesto planteaban recaudar 11.000 millones, pero el gravamen sobre patrimonio en 2008, el año en el que más se recaudó, recaudó 2.300. Cuatro veces más. ¿Cómo van a recaudar 11.000 millones con este impuesto?

"Vamos a tener que hablar de las reformas que hizo  Montoro, que desfiscalizaron hasta en 20.000 millones de euros el impuesto de sociedades"

El impuesto a las grandes fortunas es distinto al de patrimonio, que está bonificado por la mayoría de las comunidades, y por tanto ha dejado de tener capacidad recaudatoria. Pero insisto en que es parte de un todo, donde también vamos a tener que hablar de aquellas reformas que hizo Cristóbal Montoro en su momento, que desfiscalizaron hasta en 20.000 millones de euros el impuesto de sociedades. Hoy tenemos un agujero en el impuesto de sociedades, como consecuencia de una serie de deducciones y exenciones a las que tienen derecho los grandes grupos empresariales, que vamos a tener que debatir.

En esta voluntad de acercar, ¿qué tal le suena la música que propone la ministra Montero? No va a haber Presupuestos para 2020, ya será para 2021, ya habrán empezado a pensar dónde se puede cortar.

El PSOE y Unidas Podemos, antes de ser coalición de Gobierno, con más razón ahora, ya teníamos un acuerdo de Presupuestos Generales que debería permitir alumbrar estas cuentas. Ahora mismo, creo que el Gobierno tiene que trabajar muy intensamente por recomponer la mayoría política de la moción de censura, que alumbró este Gobierno, y que debe ser la que sostenga los próximos Presupuestos.

En las últimas votaciones el Gobierno ha tenido un nuevo aliado, Ciudadanos, exclusivamente en las votaciones de prórroga del estado de alarma. ¿Ve a Cs apoyando unos presupuestos que lleven todo el gasto social que ustedes quieren impulsar?

Veo a este gobierno impulsando unos Presupuestos nítidamente progresistas, nítidamente sociales, y que nítidamente refuercen los derechos sociales en este país. Y esto pasa por reforzar la mayoría política de la moción de censura. En todo caso, si Cs quiere apoyar unos PGE nítidamente progresistas y sociales, bienvenido será su apoyo.

En el Gobierno ha habido contraposiciones entre los postulados que ustedes defienden, encarnados en el vicepresidente Iglesias, y los que defiende Nadia Calviño. ¿Es mayoritaria la visión de ortodoxia económica de Calviño dentro del PSOE?

Soy de los que piensan que este Gobierno de coalición progresista tiene un enorme potencial y enormes virtudes. Es capaz de tener un sistema de pesos y contrapesos que garantiza, en primer lugar, una propuesta nítidamente progresista, lo que estábamos viendo con el IMV. Garantiza también la suma de dos cosas cruciales: la experiencia y la audacia. Y creo que este Gobierno de coalición progresista está siendo capaz de reaccionar con la suficiente experiencia acumulada, pero también con la suficiente audacia a una crisis como la que tenemos. Este Gobierno está gestionando la crisis construyendo un escudo social como nunca se había hecho. La impronta de esta coalición progresista está quedando muy clara.

El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ
El secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, en un momento de la entrevista con 'Público'. FERNANDO SÁNCHEZ

Si se ha impuesto el escudo social, parece que las tesis de Iglesias se imponen. ¿Qué habría hecho distinto el Gobierno de haber sido un Ejecutivo monocolor de Unidas Podemos?

"La coalición está funcionando y respondiendo bien, está siendo capaz de acometer los retos que tiene sobre la agenda política"

Quizás tendríamos el ingreso mínimo vital en la calle un poquito antes. En todo caso, insisto en que lo relevante aquí es que hemos construido una coalición progresista, que esta coalición es sólida y firme, como está demostrando la gestión de la crisis, incluso sometidos a una tensión muy fuerte. La coalición está funcionando y respondiendo bien, está siendo capaz de acometer los retos que tiene sobre la agenda política.

En el caso de que Bruselas apriete más de lo previsto, y partiendo de que Grecia y España son absolutamente incomparables, tenemos el ejemplo de lo que pasó con el Gobierno de Syriza en su día. ¿Hasta dónde van a estar en el Gobierno, en el caso de que la presión para la austeridad aumente?

Es un escenario completamente distinto, nosotros no contemplamos ese escenario. La realidad hoy es que el BCE está reaccionando de forma muy distinta a como lo hizo en aquel momento. La propia Comisión Europea está planteando un debate que en aquel momento ni se planteó, como es que sean las propias instituciones europeas las que emitan una deuda que podría ser a perpetuidad, y que garanticen transferencias para la reconstrucción de los países europeos.

Se ha criticado mucho al vicepresidente Iglesias, sobre todo por parte de la derecha, por la gestión de las residencias, que son competencia de las comunidades. Hoy por hoy todavía no se conocen las cifras de fallecidos en residencias, ¿por qué ?

Hay que aclarar que el estado de alarma no ha suspendido el Estado de las autonomías, y en particular en materia de centros residenciales, de personas mayores, pero también de personas con discapacidad, menores tutelados, etcétera. Han permanecido en todo momento bajo las competencias de las comunidades autónomas.

Desde la Vicepresidencia hemos tratado de apoyar a las comunidades hasta donde podíamos llegar. Teníamos la capacidad, por las competencias que nos corresponden, de impulsar financiación para que las comunidades autónomas hicieran frente a este reto, y así lo hemos hecho. Se puso en marcha un fondo social extraordinario de 300 millones de euros para que, en el marco de los servicios sociales, se reforzasen las contrataciones en estos centros. Se flexibilizó la contratación de personal, se adoptaron medidas en la dirección de garantizar que los servicios sociales fueran declarados servicios esenciales, igual que los sanitarios, precisamente para apoyar a las comunidades autónomas en el ejercicio de sus competencias. Hemos tratado de apoyar a las comunidades hasta donde nos permiten nuestras competencias, y hay que reconocer que esta situación era sumamente difícil y complicada.

¿Cuándo esto pase se va a impulsar algún tipo de revisión del modelo de residencias? En muchos casos era conocido que no había manos suficientes, que había personas que no recibían todas las atenciones que requerían. ¿Hay algo previsto?

"Si algo nos deja esta crisis es la evidencia de que el sistema de servicios sociales ha fallado en los puntos más frágiles de su cadena"

Sin duda. En el marco de la comisión de reconstrucción, esta revisión es necesaria. Si algo nos deja esta crisis es la evidencia de que el sistema de servicios sociales ha fallado en los puntos más frágiles de su cadena. Y las residencias de mayores son precisamente ese punto frágil. Creo que necesitamos revisar y repensar en profundidad el modelo de cuidados de larga duración que tenemos en nuestro país. Es un modelo que no podemos dejar sencillamente al mercado, donde los poderes públicos debemos velar para que estos cuidados se presten en condiciones de calidad y garantía suficiente.

Las comparecencias en esa comisión han comenzado esta misma semana. La oposición y la derecha fundamentalmente, han dejado claro que no tienen muchas ganas de sumarse. ¿Se puede esperar un acuerdo en el que participe el PP, vista la actitud y la voluntad? 

Creo que sus votantes no van a entender que el PP no se sume a la tarea de reconstrucción que tiene este país por delante. Para eso ya hay otras opciones políticas, para eso ya está Vox. Esa es la tarea de la extrema derecha en este país: derribar un Gobierno a costa de lo que sea. Creo que los votantes del PP, un partido que ha sido de gobierno hasta este momento, no van a entender que no quiera sumarse a la búsqueda de consensos en torno a esa comisión de reconstrucción.

Claro que tenemos posiciones distintas, que pensamos cosas distintas sobre cuestiones sociales o económicas, pero sus votantes sencillamente no van a entender que no esté dispuesto a arrimar el hombro para buscar espacios de consenso y de trabajo. En este momento no está ahí, está secuestrado por una extrema derecha que le impide formar parte de un espacio más plural, donde podamos intercambiar debates que son legítimos, y que son, o deberían ser, constructivos.

¿Les preocupan la polarización y la crispación? Cuando la derecha no gobierna acostumbra a hacer una oposición dura, a impulsar manifestaciones... Lo hemos visto con la ley del aborto, con el matrimonio igualitario, y ahora como causa general contra el Gobierno.

"Es hora de que un partido que históricamente ha sido un partido de Estado, el PP, asuma su papel de oposición. No puede seguir secuestrado por la ultraderecha"

Claro que nos preocupa este nivel de crispación y polarización que impulsa la derecha. Nos preocupa la concepción patrimonialista que tiene la derecha del Gobierno y del Estado. Cuando ellos no gobiernan casi parece que todo vale para derribar a quienes han llegado legítimamente al Gobierno por las urnas. Esto no es nuevo, viene de atrás, y nos preocupa que esta concepción se mantenga en el tiempo. Es hora de que un partido como el PP, que históricamente ha sido un partido de Estado, asuma su papel de oposición. De que entienda que los ciudadanos le han puesto en la oposición. No puede estar secuestrado por las tesis de la extrema derecha.

¿Y qué tiene que hacer el Gobierno para recuperar el espíritu de la investidura, visto que el PP no se suma? Las críticas han ido creciendo, y los apoyos a las votaciones de las prórrogas del estado de alarma han ido bajando.

En algunos momentos este Gobierno ha sabido demostrar que es capaz de escuchar. Durante las últimas semanas ha sabido demostrar que tiene esa capacidad de escucha, y debe de reforzarse e impulsarse un trabajo de reconstrucción de la mayoría política de la moción de censura. Insisto porque me parece crucial: hay una mayoría que alumbró políticamente este Gobierno, debe de reforzarse, cultivarse y cuidarse continuamente.

* VÍDEO DE NÚRIA MARTÍNEZ RIBOT Y JAIME GARCÍA-MORATO

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