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La educación valenciana une sus quejas contra los impagos

Profesores, padres y alumnos exigen al Govern de Fabra que cumpla de una vez con sus compromisos

BELÉN TOLEDO

Fotografías de alumnos tapados con mantas por falta de dinero para la calefacción, clases interrumpidas por cortes de luz, barrios enteros boquiabiertos por el riesgo de cierre de numerosas escuelas concertadas, escuelas infantiles que podrían cerrar por falta de fondos... Esta es la situación en los centros educativos del País Valencià debido a los impagos de la Generalitat. El panorama se agrava cada día que pasa y, en consecuencia, también lo hacen las quejas de profesores, padres y alumnos, que piden a la Administración que cumpla con sus compromisos económicos.

Ayer, el president valenciano, Alberto Fabra, reconoció que las imágenes de la escasez de medios en los institutos de la Comunidad 'nos avergüenzan a todos'. Durante un acto oficial en Valencia, y a preguntas de la prensa, Fabra afirmó que había dado 'instrucciones' para que los centros 'cobren los retrasos que tengan pendientes', según informa Efe. Horas después, esta promesa se tradujo en un comunicado de la Conselleria d'Educació, que afirmó que había dado 'orden de pago' de parte de la deuda.

La imagen de alumnos con mantas 'nos avergüenzaa todos', dijo Fabra

El sistema educativo recibió ayer la noticia con una mezcla de alivio y escepticismo. Es la cuarta vez que la Generalitat anuncia que pagará, según denuncia la Plataforma de Defensa de la Enseñanza Pública, formada por sindicatos, asociaciones de padres y otros colectivos. El último anuncio fallido tuvo lugar el lunes 16 de enero, cuando la consellera del ramo, María José Catalá, afirmó en la televisión autonómica que pagaría 'esta semana'. Pero llegó el viernes y los problemas de liquidez de los centros seguían.

Por eso, pese a las palabras de Fabra, ayer existían todavía ciertas reservas. 'Si el president se ha comprometido, así será. Pero hasta que no vea el dinero en las cuentas, no me lo creo', explicó José Manuel Boquet, presidente de Feceval, una de las dos grandes patronales de la escuela concertada valenciana. También en el sector público había satisfacción sólo a medias: 'Está bien, porque si no, directamente iban a tener que cerrar los institutos. Pero no es lo que pedimos', afirmó Ferran García, portavoz de CCOO, en relación a las exigencias de mejoras en la educación que profesores y sindicatos repiten ante la Administración desde hace años.

Los directores pactaron protestas 'que no perjudiquen al alumnado'

Los pagos anunciados por la conselleria serán, además, parciales. Los centros públicos de Secundaria recibirán el importe correspondiente al segundo cuatrimestre de 2011, y los concertados ingresarán el tercer trimestre del mismo año. En total serán 35 millones de euros. De ellos, el sector privado espera recibir 17,5 de una deuda total de 50,4, según los cálculos de Feceval. Por su parte, los institutos públicos sólo verán satisfecha una parte de su deuda acumulada, (60 millones de euros) según el sindicato STEPV.

La inyección anunciada por la Generalitat calmará, previsiblemente, los ánimos, pero no servirá para parar las protestas de la comunidad educativa. La manifestación del sábado pasado, organizada por la Plataforma en Defensa de la Enseñanza Pública, reunió a miles de personas en las principales ciudades del País Valencià. Su éxito fue un estímulo para mantener las reivindicaciones.

Por eso, anoche se celebraron encierros en varios institutos de Secundaria, en los que padres, alumnos y profesores compartieron cena y pancartas. 'Ya han dicho varias veces que van a pagar y no lo han hecho. Además, hay muchos motivos, aparte de los impagos, para protestar', explicó Carmina Valiente, directora del Lluís Vives de Valencia.

Por la mañana, los directores de los centros de la provincia de Valencia se concentraron ante la Conselleria d'Educació. Ahí celebraron una asamblea que se convirtió en un catálogo de las dificultades que están atravesando los centros. 'No tenemos partida presupuestaria para los laboratorios, y esto se traduce en que siguen funcionando pero sin reposición de material', explicó Josep Lluís Peris, director del instituto Ravatxol, en Valencia, que cifró la deuda de la conselleria con su centro en 53.000 euros.

'Seguimos funcionando porque tiramos de nuestros ahorros', explicó la directora del IES Jorge Juan de Puerto de Sagunto, que prefirió no dar su nombre. 'Teníamos un remanente para reformar el edificio, que está en muy viejo, pero hemos tenido que usar ese dinero para pagar los gastos corrientes', agregó.

Las quejas más llamativas seguían siendo las referentes a la falta de climatización por falta de dinero para el gas o el gasóleo. No se han librado las zonas más frías, como Muro de Alcoy (una localidad del interior montañoso de Alicante) cuyo centro estaba ayer sin calefacción. Según su vicedirector, Alex Tayá, han agotado el préstamo de la asociación de padres del centro 'en pagar a pequeños proveedores del pueblo, como fontaneros y electricistas' y ya no queda dinero para rellenar la caldera.

La situación se repite en la provincia de Valencia. La sufren, por ejemplo, en Bocairent, según la directora del instituto de esta localidad, Alicia Mafé: 'Estuvimos dos días sin calefacción en las aulas, con cinco grados en la calle. Había indignación, pero los chicos seguían viniendo. Ellos entienden que parar sería malo para su formación'.

A pesar de los casos expuestos, la asamblea de directores se cerró con un aplauso. Lo provocó uno de los asistentes, que propuso 'seguir implicando a las familias y a los alumnos en la lucha por obtener más recursos' mediante concentraciones en los centros y cartas y reuniones con los padres. Los directores acordaron, además, pedir a los profesores que no interrumpan las actividades extraescolares como medida de protesta 'porque para bajar la calidad de la educación ya está la Administración, no lo hagamos nosotros', concluyó uno de los asistentes.

Los encierros seguirán durante el día de hoy y también la semana próxima. Se trata de pedir que la Generalitat pague lo que debe, pero, además, los sindicatos mantienen otras reivindicaciones urgentes. Por un lado, piden que se cubran las bajas del profesorado. Ayer, la conselleria prometió que se adjudicarían más de 700 plazas, 'pero lo que pedimos es un compromiso serio y total, y que se cumpla', afirmó Ferran García.

Piden, además, que retire el decreto aprobado por la Generalitat en enero, en el que se reducen los complementos del sueldo de los funcionarios. Según Marc Candela, del STEPV, los docentes han sufrido en el último año y medio una rebaja en sus ingresos de entre 127 y 415 euros mensuales. Mañana los sindicatos han convocado una manifestación 'en defensa de los servicios públicos y contra los recortes del Govern de la Generalitat valenciana'.

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