En octubre de 1958 las máximas autoridades franquistas del archipiélago canario inauguraron en el monte de Las Raíces, en el municipio de El Rosario (Tenerife), un obelisco de homenaje a Francisco Franco. No era un lugar cualquiera, el monumento se erigió en el lugar que eligió el dictador para reunirse con la guarnición de Tenerife el 17 de junio de 1936 y en el que gestó el golpe de Estado contra el Gobierno legalmente constituido de la Segunda República.

Hoy, 53 años después, ese monumento todavía no se ha derribado a pesar de que el artículo 15 de la Ley de Memoria Histórica exige a las administraciones públicas que tomen 'las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones' conmemorativos del franquismo.

Para remediar esta situación, los militantes de la formación ecosocialista Alternativa Sí Se Puede están dispuestos a derribarlo ellos mismos. Fidel Vázquez, candidato a la alcaldía de El Rosario por este partido, entregó ayer en los registros del ayuntamiento de la localidad tinerfeña y del Cabildo Insular de Tenerife el proyecto de obra, acompañado de un estudio de impacto ambiental y de la solicitud de licencia de obra con el pago de la tasa municipal.

El arquitecto Joaquín Galera y la ingeniera de montes Lucía Sánchez se han encargado de realizar el proyecto de demolición; con él pretenden cumplir con la ley y ahorrar a los tinerfeños los costes de la demolición del monumento.

Tanto los proyectos como el asesoramiento jurídico y legal han sido elaborados de forma voluntaria por integrantes de esta plataforma. La ejecución de la obra también se plantea sin coste económico alguno. Alternativa Sí Se Puede ha echado mano de empresas simpatizantes que proporcionarán la maquinaria de manera gratuita y los militantes de esta plataforma actuarán como improvisados albañiles para cumplir con una reclamación que vienen haciendo desde hace meses varias asociaciones de la zona.

El candidato ecosocialista recordó que, tanto el Consistorio de El Rosario, en dos plenos, como el Cabildo, en una ocasión, acordaron la retirada del obelisco y la construcción, en su lugar, de un monumento conmemorativo del trigésimo aniversario de las primeras elecciones a cabildos y ayuntamientos.

Vázquez denuncia que ambas instituciones 'han sido incapaces de llegar a un acuerdo sobre a quién correspondía la competencia en la retirada del obelisco', un símbolo apuntó que 'ensalza la represión y la masacre de tantas personas'.

En octubre de 2010, Wladimiro Rodríguez, consejero de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife, apuntó que la retirada del monumento no estaba entre las prioridades del área, ya que supondría un coste de entre 40.000 y 60.000 euros. Los militantes de Alternativa Sí Se Puede esperan obtener la licencia de obra para acometer el derribo y avisan de que, en caso contrario, acudirán a los tribunales para demandar que en el municipio se cumpla con la Ley de Memoria.