Si los jóvenes empiezan a beber alcohol cada vez antes, se deberá adelantar la edad en que se les empieza a concienciar sobre los riesgos de su abuso. Con ese planteamiento, el Gobierno está ultimando con las comunidades autónomas y con varias ONG un plan que lleve a la Educación Primaria el mensaje de que las borracheras pasan una factura muy cara.

El Gobierno pretende que los niños empiecen a recibir información sobre los riesgos del consumo desmesurado del alcohol desde los ocho y nueve años (tercero de Primaria), como ya se hace en Estados Unidos y en los países del norte de Europa. Así lo anunció ayer la delegada del Gobierno para el Plan Nacional Sobre Drogas (PNSD), Nuria Espí, en la presentación de las XXXVIII Jornadas Nacionales de Socidrogalcohol, que se celebran hasta hoy en Madrid.

'España ha vivido en los últimos años un cambio de tendencia en el consumo de alcohol brutal. Siempre ha habido alcoholismo, pero el consumo en jóvenes no tiene precedentes', explicó Espí. Según alerta, se dan casos de niños de 12 años que ya reconocen haber consumido alcohol e incluso 'haberse emborrachado'. A su juicio, acabar con esta realidad es muy complicado en un país donde la sociedad no percibe el alcohol como un riesgo para la salud.

'Siempre ha habido alcoholismo, pero el consumo en jóvenes no tiene precedentes'Hasta ahora se conciencia del riesgo de las borracheras a partir de los 10 años, pero no de una forma unificada y obligatoria. Más allá de las iniciativas que llevan a cabo de forma independiente las comunidades autónomas, el único programa estatal con este fin es un concurso escolar llamado El secreto de la buena vida.

Desde 2001, el programa premia a los niños y niñas de 10 a 12 años que obtengan mejores resultados en un juego multimedia consistente en superar una serie de pruebas que evalúan su resistencia al envite de las drogas. Participan los colegios que así lo desean. El año pasado jugaron 97.664 chavales.

El PNSD quiere dar un paso más allá. Pretende hacer de la concienciación una obligación en la escuela. Espí se reunirá el jueves de la semana que viene con representantes de las autonomías, que tienen las competencias en educación, definir los flecos de la estrategia, con el fin de que sea la misma en toda España. 'Todas tienen mucha predisposición, ya que los problemas les atañen directamente', dijo. También se involucrará en la iniciativa el Ministerio de Educación. Espí pretende que el consumo desmesurado de alcohol sea considerado una adicción más, al mismo nivel de las drogas ilegales.