Unos, el enfrentamiento. Otros, el diálogo. Batasuna no se rompe, pero la ilegalizada formación está en estos momentos muy lejos del monolitismo del que siempre han presumido públicamente sus principales dirigentes. Un reciente documento interno de Batasuna, a parte de cuyo contenido ha tenido acceso Público, apuesta abiertamente por el diálogo con el Gobierno frente a la posición más beligerante que defendían los integrantes de la Mesa Nacional detenidos en la redada de Segura (Guipúzcoa) en octubre.

Así, frente a afirmaciones como que 'el proceso de negociación está acabado y no hay posibilidad de llevarlo a cabo en el corto plazo' que se recogían en el escrito Herri Batzarretarako Gidoia (Guía para las Asambleas del Pueblo) incautado a Maite Fernández de Labastida, detenida en aquella operación policial, el nuevo documento, fechado un mes después de la redada que descabezó Batasuna, apuesta abiertamente por el diálogo: 'Estamos convencidos de que se trata de la única vía posible para remontar el conflicto', afirman con rotundidad sus autores antes de recalcar el 'compromiso total y completo' de Batasuna por encontrar una solución dialogada.

La sombra de ANV

El texto, fechado el pasado mes de noviembre y puesto en circulación antes de las pasadas Navidades, ha sido elaborado por el aparato internacional de la ilegalizada formación y parece tener como objetivo, precisamente, transmitir a diferentes instituciones extranjeras y, más en concreto, a la Unión Europea la necesidad de que se impliquen de modo 'urgente' en la búsqueda de un nuevo escenario de diálogo.

En este sentido, los autores del documento recuerdan que la UE así lo ha hecho en 'la resolución del conflicto anglo-irlandés' y en otros de 'Europa Central y de los Balcanes', y lo está haciendo en Kosovo. 'Por ello, los actores internacionales deben ayudar a obtener una paz justa y duradera en esta esquina de Europa', añaden, en alusión al País Vasco.

La redacción del texto se produjo antes del atentado en Capbreton del 1 de diciembre, que costó la vida a dos guardias civiles y y catalizó el debate sobre la ilegalización de ANV. Pero lo cierto es que el debate ya estaba entonces sobre la mesa. Y ese factor ha pesado, sin duda, en la nueva apuesta por el diálogo.

No obstante, el documento de Batasuna sigue culpando de la ruptura del proceso de paz al Gobierno y recuerda que en el último contacto entre representantes de la banda armada y emisarios de José Luis Rodríguez Zapatero, a mediados de mayo de 2007, ETA 'declaró su voluntad de realizar el desmantelamiento de sus arsenales y de sus estructuras' en presencia de lo que denomina 'Comisión Internacional de Supervisión', en alusión a los intermediarios irlandeses, sudafricanos y suizos que participaron en el mismo.

La ilegalizada formación tampoco varía la oferta que está dispuesta a poner en esa hipotética mesa de diálogo que reclaman: la creación de una autonomía que aglutine el actual País Vasco y Navarra.
Se trata de una propuesta que califican de 'integradora, razonable y viable' y que, en su opinión, 'no tiene nada que ver con nuestros postulados políticos, la independencia, pero que permite a las diversas sensibilidades políticas cohabitar de un modo democrático y civilizado'.