El político opositor y excalde de Yekaterimburgo Yevgueni Roizman ha sido detenido este miércoles en su casa acusado de desprestigiar a las Fuerzas Armadas de Rusia, delito que se castiga con hasta cinco años de prisión. Esta detención, grabada y publicada en redes sociales, es otra medida de represión de las autoridades rusas contra los críticos de la guerra en Ucrania. 

Roizman se ha pronunciado en repetidas oportunidades contra la "operación militar especial" que Rusia lanzó en Ucrania hace seis meses. "La guerra con Ucrania es terrible, tonta, inútil, es la guerra más infame, vergonzosa e injusta en la historia de Rusia", dijo en su momento el político, de 59 años. Más tarde declaró que "ni en el juicio final" se arrepentiría de estas palabras. En el vídeo de su detención de este miércoles se ve al político explicando a los periodistas que estaba acusado "básicamente por una frase, 'la invasión de Ucrania'".  "Lo he dicho en todas partes y lo diré ahora", ha añadido.

"El motivo de la apertura de la causa fue un vídeo en su canal de Youtube", ha afirmado una fuente policial citada por la agencia oficial rusa TASS. Según la fuente, Roizman estaba siendo investigado por "desacreditar al ejército ruso".

El caso contra Roizman ha sido incoado según el artículo 280.3 del Código Penal de Rusia, que sanciona "acciones públicas con el fin de desprestigiar el empleo de la Fuerzas Armadas". Este delito fue introducido tras la invasión rusa de Ucrania el 24 de febrero. 

Rusia califica sus acciones en Ucrania de "operación militar especial" y los ciudadanos se arriesgan a ser procesados si utilizan las palabras "guerra" o "invasión". El delito que se le imputa al opositor se castiga con multas o hasta tres años de prisión, que pueden ser hasta cinco si dichas acciones públicas conducen a desórdenes masivos u otras consecuencias graves.

Roizman ganó popularidad en el país cuando en 1999 creó una fundación para la lucha contra la drogadicción y se convirtió en una de las figuras de la oposición más destacadas de Rusia en 2013, tras ser elegido alcalde de Ekaterimburgo, la cuarta ciudad más grande de Rusia. Dmitri Gudkov, antiguo miembro de la oposición en la Duma Estatal de Rusia, ha escrito en Telegram que la detención de Roizman es "una venganza por decir la verdad sobre una guerra que ya lleva medio año".