Este martes un joven de 18 años irrumpió con un rifle y una pistola en la escuela primaria Robb Elementary, en la localidad de Uvalde (Texas), asesinando a 19 niños y dos profesoras. Desde entonces, el mundo ha focalizado su interés en la región y en el debate sobre la famosa segunda enmienda. 

El jueves, Joe García, marido de la profesora asesinada Irma García, perdía la vida a causa de un ataque al corazón. Mientras Joe se preparaba para el funeral de su mujer, se sentó en una silla con las flores que había comprado para Irma y "se cayó fulminantemente". Su hijo Christian comentó que intentaron reanimarle durante varios minutos, pero "no lo consiguieron".

El primero en contar la trágica noticia fue su sobrino, John Martínez, a través de su cuenta de Twitter: "Extremadamente desgarrador. Cuento con profundo dolor que el esposo de mi tía Irma, Joe García, ha fallecido como consecuencia del dolor. No tengo palabras para poder explicar cómo nos sentimos."

Poco después de la publicación del tuit, el periodista del canal Fox 26 de Houston, Matthew Seedorff, se refirió también al fallecimiento de Joe confirmando que había hablado con miembros de su familia. Este aportaba un nuevo dato: la pareja llevaba casada 24 años y tenía cuatro hijos. 

La noticia se confirmó finalmente cuando una de las primas de la fallecida, Debra Austin, aseguró que a Joe se le había "roto el corazón" tras la pérdida de su esposa, "quien había sido el amor de su vida durante más de 30 años." La pareja deja a cuatro hijos huérfanos de 13, 15, 19 y 23 años. Como método para ayudar a su familia, ha creado un GoFundMe (plataforma estadounidense de financiación colectiva que permite a las personas recaudar dinero para determinadas causas) que pronto ha conseguido su objetivo. 

Irma García, profesora ejemplar hasta el último momento

Según diversas declaraciones a la cadena NBC, la profesora, que llevaba más de 23 años trabajando en el colegio de educación primaria hizo todo lo posible para salvar a los niños de una muerte segura. Christian García, uno de los hijos de Irma, comentó al citado medio que tanto Eva Mireles (la otra profesora asesinada) como su madre hicieron de escudo humano para proteger a sus estudiantes durante el tiroteo. 

García y Mireles fueron premiadas junto a 17 compañeros más del área de San Antonio (Texas) por la Universidad Trinity a la excelencia en la enseñanza en 2019. Con este, ya son 213 tiroteos en lo que va de año en Estados Unidos.