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Racismo Sale a la luz un nuevo acto de brutalidad policial en Nueva York contra un hombre negro

Daniel Prude, de 41 años, falleció después de que agentes de la Policía le cubrieran su cabeza con una capucha y le presionaran el rostro contra el pavimento durante dos minutos.

Momento en la que los policías le colocan una capucha en la cabeza a Daniel Prude, a quien le presionaran el rostro contra el pavimento durante dos minutos y falleció. / ROCHESTER POLICE
Momento en la que los policías le colocan una capucha en la cabeza a Daniel Prude, a quien le presionaron el rostro contra el pavimento durante dos minutos y falleció. / ROCHESTER POLICE

público/efe

Un hombre negro, Daniel Prude, de 41 años, falleció después de que agentes de la policía de Rochester, en Nueva York, le detuvieran, le cubrieran su cabeza con una capucha y le presionaran el rostro contra el pavimento durante dos minutos, informan medios estadounidenses.

El hecho se produjo el pasado 23 de marzo, pero ha sido hecho público ahora por su familia que ha presentado varios vídeos del suceso en lo que parece un nuevo acto de violencia policial. Prude murió una semana después de ser detenido, el 30 de marzo, cuando se le retiró el soporte vital que se le había aplicado después de llegar maltrecho al hospital.

Su muerte se produjo además dos meses antes de la de George Floyd, en otro caso de violencia policial en Minneapolis, que desencadenó fuertes protestas en varias ciudades de EE.UU. A raíz de las muertes de Floyd y de Rayshard Brooks, el país no ha descansado de protestas que se convocan con los casos de violencia policial que no cesan. 

Una mujer pasa por delante de fotografías de personas asesinadas por la Policía, colgadas en una valla de seguridad cerca de la Casa Blanca. REUTERS / Jonathan Ernst
Una mujer pasa por delante de fotografías de personas asesinadas por la Policía, colgadas en una valla de seguridad cerca de la Casa Blanca. REUTERS / Jonathan Ernst

Los agentes involucrados continúan trabajando

La fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, y el jefe de policía de Rochester dijeron que estaban investigando la muerte. Los oficiales involucrados en el suceso todavía están de servicio, según informa The New York Times.

El diario explica que Joe Prude, hermano de la víctima, llamó al teléfono de emergencias al comprobar que su pariente, que había venido de visita desde Chicago, presentaba un estado nervioso y saliera corriendo de su casa en un estado errático.

"El hombre estaba indefenso, completamente desnudo en el suelo. Ya lo habían esposado. Venga ya. ¿Cuántos hermanos más tienen que morir para que esta sociedad entienda que esto se tiene que acabar?", añadió el hermano de la víctima. 

Prude había sido trasladado a un hospital el día anterior después de que aparentemente comenzara a experimentar problemas de salud mental, según muestran los informes policiales que cita el diario neoyorquino.

En los vídeos publicados en varios medios se ve a Prude, quien se ha desnudado, con las manos detrás de la espalda, esposado y gritando antes de que la policía le tapara la cabeza con una capucha, aparentemente para evitar que les escupiera, ya que había gritado que tenía coronavirus.

Después de dos minutos, Prude ya no se movía ni hablaba, por lo que se decide llamar a los servicios médicos de urgencia, que le practican maniobras de resucitación y le trasladan a un hospital.

Según el rotativo, el médico forense del condado de Monroe dictaminó que la muerte de Prude fue un homicidio causado por "complicaciones de la asfixia en el marco de la restricción física", según un informe de la autopsia.

El "delirio excitado" que padecía el fallecido y la intoxicación aguda por varios fármacos que había tomado fueron también factores que contribuyeron a su estado, según el informe.

El caso de Prude, que podría ser considerado de violencia policial, se une a otros ocurridos en EE.UU. en los últimos meses que han generado protestas en diversas partes del país.

Trump no quiere hablar del racismo

Diversas organizaciones han vinculado estos hechos, en los que casi siempre las víctimas son ciudadanos negros, con el supuesto racismo con el que actúan algunos cuerpos policiales en EEUU. Mientras el presidente Donald Trump, evitó este miércoles de nuevo hablar de racismo e injusticia social y aseguró que los manifestantes "sólo entienden la fuerza", sin recurrir a ningún tipo de tono conciliador, pese a que las tensiones han provocado víctimas en las movilizaciones.

"Si hay muchedumbres violentas sólo me tienen que llamar y lo solucionamos en una hora", aseguró el presidente en referencia al ofrecimiento de agentes federales para sofocar las protestas en la ciudad de Portland (Oregon), que este fin de semana se tornaron violentas cuando una columna de vehículos con banderas de Trump se enfrentaron con manifestantes críticos con la Policía.

En opinión de Trump, los que protestan contra la brutalidad policial y el racismo "sólo entienden una cosa: la fuerza. Y es fuerza lo que tenemos".

Manifestación antirracista durante la última noche de la Convención Nacional Republicana (RNC) en Washington, DC, EE. UU. EFE / EPA / MICHAEL REYNOLDS
Manifestación antirracista durante la última noche de la Convención Nacional Republicana (RNC) en Washington, DC, EE. UU. EFE / EPA / MICHAEL REYNOLDS

"La policía hace un gran trabajo (...) Deberíamos estar hablando de la violencia que hemos visto aquí (en Kenosha), en Portland y en otros lugares", remarcó Trump, que llegó a comparar en una entrevista el hecho de que un policía haga un uso excesivo de la fuerza a un mal cálculo similar al de fallar "un putt a un metro" en un torneo de golf.

La mayoría de esas protestas, que se han repetido sin descanso en todo el país, fueron pacíficas, pero algunas desembocaron en disturbios, en respuesta a actuaciones policiales excesivas o por las provocaciones de facciones de ultraderecha.

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