Para cerrar este pequeño ciclo de comentarios sobre quienes toman las decisiones en el mundo de hoy, y que son consecuencia de la arquitectura global desarrollada después de la mencionada 2ª Guerra Mundial, hablemos ahora de Naciones Unidas, que si bien no las podemos considerar una institución negativa de por sí ni dignas de una inmediata disolución como las de los artículos precedentes, sí que funcionan también de manera que los beneficiados sean los de siempre. Para demostrarlo, analicemos quién toma las decisiones en dos de los tres pilares de su estructura (obviamos la Asamblea porque no hace más que recomendaciones sin vinculación alguna). El Secretario General de la ONU es actualmente Ban Ki Moon, quien en lugar de ser un personaje procedente del mundo humanitario o de la solidaridad o relaciones internacionales, como cualquiera pudiera imaginar, resulta haber sido el anterior director de los servicios secretos de Corea del Sur, algo así como la CIA estadounidense. Sin comentarios. Además su predecesor, el Sr. Annan, resulta ser el sobrino de uno de los habituales del Club Bilderberg (véase "Quièn manda? (1)" para más referencias sobre este club). Por otro lado, tenemos el Consejo de Seguridad, encargado de mantener la paz en el planeta. De sus 15 miembros, cinco son permanentes (EEUU, Reino Unido, Francia, Rusia y China, o lo que es lo mismo, quienes salieron victoriosos de la mencionada guerra, más el gigante asiático). Pues estos cinco estados se reparten tres cuartas partes del negocio internacional de venta de armas. Con tales referencias, ya entiendo porqué en el mundo hay más de treinta conflictos armados desde ya hace demasiados años. De pena.