Tras otra maratoniana reunión de más de seis horas, este jueves, Gobierno y agentes sociales no lograron un acuerdo sobre la ampliación de los ERTE por fuerza mayor, creados como consecuencia de la pandemia del coronavirus, y cuya vigencia acaba dentro de cinco días, concretamente el 30 de septiembre.

Las negociaciones, no obstante, no se han roto definitivamente y, una vez más, el Gobierno se ha comprometido a presentar en las próximas horas una nueva propuesta para intentar recoger las últimas reivindicaciones de empresarios y sindicatos. En esta mesa de diálogo social participan los Ministerios de Trabajo y Seguridad Social.

Y, aunque desde el Ejecutivo han informado a Público de que ha habido avances, y de que las posiciones están más cercanas, fuentes tanto del ámbito empresarial como sindical indicaron que todavía cualquier posibilidad de acuerdo está muy lejana. Desde CCOO sí han reconocido "importantes avances".

Sobre todo, persisten las diferencias en cuanto a las cotizaciones, el carácter sectorial de los ERTE que quiere implantar el Gobierno, y la definición de esa figura llamada "ERTE por rebrote", entre otros temas.

Uno de esos aspectos para poder llegar al acuerdo es aumentar la protección por desempleo, y también se ha planteado ampliar la protección a más empresas y trabajadores en hostelería y comercio.

Aunque algunas fuentes del empresariado apuntaron ya a la ruptura de las negociaciones, la parte sindical asegura que sigue dispuesta a seguir negociando y a la espera de un nuevo documento del Gobierno para poder alcanzar el acuerdo.

Por su parte, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha reiterado en los últimos días que el Ejecutivo "no se levantará de la silla" hasta conseguir llegar a un pacto, y que su intención sigue siendo no aprobar la ampliación de los ERTE unilateralmente, sino respaldada por nuevo acuerdo social.