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Operación lezo El Fiscal Jefe Anticorrupción niega las filtraciones a González y descarta dimitir 

Manuel Moix, en la picota por las sospechas de que ha torpedeado las investigaciones en la 'Operación Lezo', confiesa que conoce a González pero niegan que sean amigos y  achaca a "discrepancias normales" sus diferencias de criterio con otros fiscales.

El nuevo fiscal Anticorrupción, Manuel Moix. EFE/Archivo

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A Manuel Moix, el Fiscal Jefe Anticorrupción, no le consta que haya habido filtraciones a los acusados de la Operación Lezo, tal y como señalan varias informaciones periodísticas basadas en las conversaciones grabadas a Ignacio González.

Así lo ha afirmado este martes por la mañana Moix en una entrevista en la cadena Ser. Moix, en la picota por las sospechas de que ha torpedeado las investigaciones a Ignacio González y su entorno, lo ha negado todo, incluso que el juez tuviera que ordenar la colocación de un micrófono oculto en el despacho de Ignacio González ante los permanentes avisos al expresidente de la Comunidad de Madrid de que estaba siendo investigado. 

"A la Fiscalía no le constan filtraciones. El micrófono en el despacho de Ignacio González se colocó como consecuencia de la investigación que se está realizando. Eso no quiere decir que no sea verdad [que haya filtraciones] porque yo llegué hace un mes a la Fiscalía Anticorrupción". 

Moix negó tener relación de amistad con Ignacio González y se defendió de las acusaciones de falta de imparcialidad, sobre todo después de que González se alegrara en una conversación con Eduardo Zaplana del posible nombramiento de Moix en Anticorrupción: "González dice en una conversación: 'Moix es un tipo bueno y un tipo serio', pero nada más. Eso no daña mi credibilidad ni la de la Fiscalía porque ha sido precisamente la Fiscalía la que ha pedido prisión para González". 

Moix también aseguró en la entrevista que no se plantea dimitir. Reconoció que conoce a González de su etapa como Fisca jefe en Madrid: "Conozco a Ignacio González, pero no somos amigos; las relaciones eran meramente institucionales", insistió Moix, quien también dijo ignorar por qué González dijo de él que "era bueno": "Eso habría que preguntárselo a González. Mi nombramiento no fue bueno para él, porque ahora está en la cárcel". 

El Fiscal Jefe Anticorrupción achacó a "discrepancias normales" sus diferencias de criterio con otros fiscales. Dijo que en ningún momento se negó practicar un registro ni que tampoco se negó a investigar la gestión del Canal de Isabel II en la época que Alberto Ruiz-Gallardón fue presidente de la Comunidad de Madrid. "Yo no me negué. Yo lo que dije fue que al investigar una presunta organización criminal por una operación realizada en 2001, cuando no estaba aún González, era necesario investigarlo en otro procedimiento". 

Explicó también Moix por qué se negó a calificar de organización criminal la trama encabezada por González: "Yo no lo veía claro, para mí no estaba acreditado. Opinaba y sigo opinando lo mismo, pero si después de la documentación que se ha requisado se demuestra lo contrario, no tendré problema en cambiar de opinión".

"Había diferencias de criterio y razonablemente se lleva a la Junta de Fiscales y tomo la decisión oyendo a los fiscales. Es lo más normal que haya una discusión jurídica y se resuelve conforme a los estatutos y con transparencia", se justifica Moix.

Moix se ha mostrado partidario de eliminar la figura de la acusación popular, tan importante en la investigación y el esclarecimiento de varios casos muy importantes, aunque no ha sabido explicar por qué más allá de la "dilación de los procesos" y de la actuación del Sindicato ultra Manos Limpias. Al ser preguntado por las dilaciones provocadas por el PP, no dio respuesta alguna: "Ese es un debate más amplio", se limitó a decir. 

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