La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha abierto las diligencias de investigación tras la denuncia del PSOE por los hechos ocurridos en la concentración del pasado 31 de diciembre frente a la sede socialista en la calle de Ferraz de Madrid, en la que fue colgado y golpeado un muñeco que simulaba al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

La Fiscalía ha recibido un oficio de la Secretaría Técnica de la Fiscalía General del Estado en el que se da cuenta de la denuncia presentada el pasado día 5 por el PSOE.

La denuncia se refiere a las circunstancias relativas a la convocatoria y organización de la concentración y, en concreto, a los hechos ocurridos entre las 22.00 y las 00.00 horas de la noche del 31 de diciembre de 2023, cuando se colgó un muñeco simulando ser Pedro Sánchez al que se golpeó repetidamente mientras se proferían diversas expresiones "que pudieran ser constitutivas de delito".

Según informa la Fiscalía de la Audiencia Nacional, la misma ha procedido este viernes a la apertura de diligencias de investigación penal para el estudio de los hechos denunciados, determinación de posibles delitos y competencia para su conocimiento.

Las protestas fueron convocadas por Revuelta, afín a Vox

Las protestas en las que grupos de ultras colgaron y golpearon a un muñeco que simulaba ser el presidente del Gobierno fueron convocadas a petición del grupo Revuelta, vinculado a Vox, según su supuesto organizador. 

El hombre citado por la Policía Nacional por supuestamente convocar la protesta de Nochevieja en la sede del PSOE prestó declaración el pasado 3 de enero ante los agentes en calidad de investigado no detenido.

En sus declaraciones, admitió que organizó la protesta, pero que lo hizo como "un favor" a Revuelta, la organización juvenil en la órbita de Vox. "A mí los de Revuelta me pidieron el favor y lo hice", se limitó a declarar a los periodistas a su entrada en las dependencias de la Brigada Provincial de Información de la Policía Nacional de Madrid. 

La protesta de Nochevieja, como las que se vienen celebrando desde hace casi dos meses junto a la sede socialista de la madrileña calle de Ferraz, tuvo como protagonista a un muñeco vestido con traje y nariz de Pinocho al que algunos de los participantes, jaleados por los asistentes, colgaron y golpearon hasta romperlo.

Los socialistas presentaron una denuncia ante la Fiscalía General del Estado, apuntando a un posible delito de incitación al odio, en el que subrayan la relación de los organizadores de la protesta con Vox.