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El Gobierno impone al CGPJ un plazo para renovar el Tribunal Constitucional antes del 13 de septiembre

El PSOE añade in extremis una enmienda en la reforma de la ley orgánica del poder judicial que fija un plazo máximo de tres meses para renovar a un tercio de los magistrados. El plazo empezó a contar el 12 de junio, fecha en la que expiró el mandato de los jueces salientes. 

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Sede del Tribunal Constitucional en Madrid en una imagen de archivo. - ARCHIVO

A través de una enmienda añadida in extremis en la propuesta del PSOE de reforma de la ley orgánica del Poder Judicial, el Gobierno insta al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) a nombrar a los dos nuevos magistrados del  Tribunal Constitucional que le corresponden por ley antes del 13 de septiembre, según ha podido confirmar Público de fuentes socialistas. Al Tribunal Constitucional le toca ahora renovar a un tercio de sus 12 miembros. El CGPJ, de mayoría conservadora, tiene que proponer dos nombres. Los otros dos le corresponden al Gobierno. 

En la propuesta del PSOE se fija un plazo máximo de tres meses al CGPJ para nombrar a los nuevos jueces del Constitucional. La cuestión es que ese plazo empezó a contar el pasado 12 de junio, día en el que expiró el mandato de un tercio de los magistrados de los 12 que forman el Constitucional.

La intención del PSOE es reformar el artículo 570 bis de la Ley Orgánica 6/1985. En concreto se introduce un punto en el apartado 1 del artículo 570 bis. El texto quedaría así: "1.ª La propuesta de nombramiento, por mayoría de tres quintos, de los dos Magistrados del Tribunal Constitucional cuya designación corresponde al Consejo General del Poder Judicial, que tendrá que realizarse en el plazo máximo de tres meses a contar desde el día siguiente al vencimiento del mandato anterior".

La reforma propuesta  por el PSOE tiene como objetivo facilitar la renovación inmediata del Tribunal Constitucional y conseguir una mayoría del sector progresista frente al actual bloque conservador que domina el Constitucional.

Para ello, el PSOE ha dado marchas atrás y rectifica en parte la reforma que impulsó el año pasado y que impide al CGPJ hacer nombramientos mientras esté en funciones. En realidad es una contrarreforma con la que el Gobierno pretende que el CGPJ pueda nombrar a miembros del Tribunal Constitucional pero no de otros órganos e instancias judiciales, como podría ser el caso del Tribunal Supremo.

Este jueves se vota en el Congreso la propuesta socialista.  Parece que saldrá adelante: el Ejecutivo de Pedro Sánchez puede contar con el apoyo de Unidas Podemos, que un principio rechazó la iniciativa por no estar pactada y considerarla insuficiente. ERC, PNV y Bildu también se han sumado al apoyo. En contra se han posicionado PP, Vox y Ciudadanos.

El actual CGPJ, de mayoría conservadora, también se ha opuesto a la modificación y ve una "contradicción" la proposición socialista porque, dice, mientras la intención es evitar las dificultades que el texto vigente supone para la renovación de los órganos constitucionales, "tan Órgano Constitucional es el Tribunal de Garantías como lo son los Juzgados y Tribunales, servidos por jueces y magistrados integrantes del Poder Judicial". 

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