Público
Público

Horrach: El caso de Fernández Díaz "es ejemplo de utilización perversa de las instituciones con fines políticos”

Denuncia una “falta coraje en los jueces y tribunales” por no frenar a Manos Limpias, como en el caso Nóos, donde sería "una sorpresa" la condena a la infanta Cristina.  Abandona la Fiscalía por motivos personales y por "hastío profesional".  

El fiscal anticorrupción de Baleares y del caso Nóos, Pedro Horrach, junto a la directora de la revista Vanity Fair, Lourdes Garzón, durante el desayuno informativo en el que ha participado hoy, a pocas semanas de que se conozca la sentencia de ese caso, momento en el que abandonará la Fiscalía para ejercer la abogacía. EFE/Alvarado

JULIA PÉREZ

MADRID.- El Fiscal Anticorrupción del caso Nóos, Pedro Horrach, ha destacado que las conversaciones entre el exministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y el exdirector de la Oficina Antrifraude, Daniel de Alfonso, reveladas por Público “es otro ejemplo de utilización perversa de las instituciones para fines políticos".

Desde que Público revelara las conversaciones entre Fernández Díaz y De Alfonso, donde ambos construyen casos contra líderes políticos soberanistas, no se han adoptado medida política alguna, denuncia Horrach. “Ni a nivel mediático tampoco he visto crítica", ni eco suficiente.

A su juicio, este escándalo, divulgado en junio pasado, constituye ”un atentado a la base o a la esencia del sistema democrático”.

El Congreso ha aplazado este miércoles la designación de Fernández Díaz como presidente de la Comisión de Exteriores del Congreso.

En un desayuno informativo convocado por Vanity Fair, Pedro Horrach ha reconocido que abandona el ejercicio como fiscal para pasar a ser abogado por motivos personales, pero también por “hastío profesional”.

Le sorprendería la condena de la infanta

A escasas semanas de promulgarse la sentencia del caso Nóos, donde Horrach ha ejercido la acusación pública, el aún fiscal considera que "sería una sorpresas para mi" que Cristina de Borbón fuera condenada por delito fiscal . Ello supondría "la primera vez en España, no solo que se sienta en el banquillo una persona por hechos similares a este, sino que además es condenada".

El de la infanta es, a su juicio, "uno de los casos donde la presunción de inocencia saltó por los aires desde el minuto uno que estuvo imputada", ya que los medios de comunicación se dedicaron, ha dicho, a "magnificar cualquier dato que en circunstancias ordinarias era nimio e insignificante".

Horrach reconoce que se marcha de la Fiscalía para ejercer como abogado por motivos personales, pero también por "hastío profesional" tras haberse encargado de investigar los principales casos de corrupción de Baleares, donde pesa la presión del entorno en un sitio pequeño como Mallorca.

El caso Nóos le ha marcado y sobrelleva como puede el que le llamen  "el abogado defensor de la infanta". "Qué le voy a hacer, asumirlo con humor", ha añadido.

El juicio fue "de mucha tensión". Sentía estar dentro de "un Gran Hermano", ya que se retransmitía de manera parecida al reality show: con las mismas cámaras, el sudor que se veía por el ojo derecho", pendientes de las pantallas.. Y eso

Falta de coraje en jueces y tribunales

Horrach denuncia la "falta de coraje en jueces y tribunales; por eso estamos donde estamos" ante el abuso de la acusación popular ejercida por Manos Limpias.

Así, ha señalado al tribunal del caso Nóos, donde al comienzo del juicio, Manos Limpias retiró "sorpresivamente" los cargos a Miguel Tejeiro, exsecretario del Instituto Nóos,  argumentando que era una decisión estratégica: "¿Cómo puede retirarse una acusación de 8 años aludiendo a motivos estratégicos?", se ha preguntado Horrach mientras explicaba que era motivo suficiente para expulsar del caso a la acusación popular por "abuso manifiesto del Derecho".

En ese momento, Horrach se ha indignado ante los intentos de que se equipare el papel de las acusaciones populares al de la Fiscalía:  "Ni consentía ni consiento que se equipare una acusación popular con la representación de la acusación pública como es la Fiscalía; ¡sólo faltaría! ¡Hasta aquí podríamos llegar! Creo que las instituciones no han sabido defenderse" ni hacerse valer.​

El Gobierno no puede dar órdenes

Pedor Horrach también ha respondido ante la afirmación del ministro de Justicia, Rafael Catala, respecto a que la Fiscalía puede recibir órdenes del Gobierno.

Pedro Horrach ha matizado que la política criminal la decide el Gobierno, y su instrumento es la Fiscalía. "Pero una cosa es llevar las directrices de política criminal y otra muy distinta es dar ordenes en asuntos particulares". No existe esta posibilidad, ha enfatizado. 

Horrach confía en que los "mecanismos suficientes" de los que disponen los fiscales para negarse a recibir órdenes: son funcionarios públicos inamovibles y "gozamos de total independencia".

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias