El juzgado de instrucción número 7 de Barcelona, ​​que investiga las cargas policiales durante el referéndum del 1 de octubre, ha imputado a cinco agentes más para las cargas en la escuela Àgora, la Infant Jesús y las escuelas Pías de la capital catalana, las tres en la capital catalana. Con estos, ya son nueve los policías imputados por la operación de la Policía Nacional contra la votación.

La investigación se hace a raíz de las denuncias presentadas por algunos vecinos y vecinas que fueron a ejercer el voto el 1-O. El juez aún no ha especificado qué delitos se les imputa y están citados "en base unos hechos". La semana pasada, tres agentes fueron citados por este juzgado por las actuaciones en el IES Pau Claris de Barcelona, ​​por considerarla "desproporcionadas y peligrosas".

El teniente de alcalde de Derechos Ciudadanos de Barcelona, Jaume Asens, ha informado en su cuenta de Twitter de que los investigados son un jefe operativo y dos agentes por su actuación en el CEIP Àgora, un agente por su intervención en el centro Escoles Pies de Sant Antoni y otro agente por su actuación en la Escola Infant Jesús.

Ha destacado que "gracias a la acusación del Ayuntamiento tendrán que rendir cuentas por imágenes como estas", en referencia a un vídeo adjunto con heridos en las cargas policiales.

En un auto sobre la actuación en el CEIP Àgora al que ha tenido acceso Europa Press, el juez considera que el uso de la fuerza por parte de los agentes "aparece como desproporcionado tanto respecto a la situación existente como a los fines de la intervención".

El magistrado recuerda que los agentes acudieron al centro educativo en cumplimiento de las órdenes del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) de impedir el referéndum en edificios públicos y requisar el material, y que, al encontrar resistencia ciudadana, iniciaron la carga policial.

Golpearon de forma "indiscriminada"

También afirma el juez que sin que pueda saberse el motivo, los policías usaron sus defensas "golpeando de forma indiscriminada" a las personas concentradas y destaca que los golpes fueron de arriba abajo, por lo que hubo varios golpes en la cabeza que precisaron puntos de sutura.

En un auto sobre la actuación en Escoles Pies de Sant Antoni, señala que, sin previo aviso, los agentes agarraron, lanzaron al suelo o empujaron a las personas concentradas "sin miramiento alguno y utilizando ciertamente una violencia desproporcionada".

Añade que en los vídeos que forman parte de la causa "se observan incluso agresiones claramente gratuitas" y explica el caso de un agente de información no identificado que dio una patada a un ciudadano que estaba en el suelo, y el de otro ciudadano al que un agente dio tres puñetazos en el costado mientras que otro lo cogió por el cuello y le lanzó al suelo —estos dos policías tampoco han sido identificados—.

En el caso de la Escola Infant Jesús, el juez indica que la actuación policial "no estaba amparada por el auto del TSJC" —como reconoce el cuerpo policial en un informe aportado al juez al tratarse de una entidad privada— y cuestiona el motivo por el que los agentes intentaron retirar a los concentrados.

"Acabar con la impunidad"

El abogado del centro por los derechos humanos Iridia Andrés García ha declarado que estas cinco nuevas imputaciones "suponen un nuevo paso para acabar con la impunidad del 1 de octubre" y que ya son seis los centros educativos en los que hay agentes investigados.

Ha destacado el trabajo de la ciudadanía, que se unió en 'Som Defensores' para conseguir pruebas por las que el juez ha abierto las investigaciones.

También ha lamentado el archivo de una causa por una actuación policial en la escuela Mare Nostrum a raíz de la dificultad de identificar a agentes policiales.

Hasta ahora ya estaban investigados por este mismo Juzgado cuatro agentes de la Policía Nacional por actuaciones en Barcelona el 1-O.