Un nuevo audio, desvelado por el podcast La Base de Público, profundiza en la cadena de favores que se fraguó entre altos mandos de la cúpula policial en tiempos de Mariano Rajoy, lo que se conoce como las 'cloacas de Interior', y el preboste de la comunicación Mauricio Casals, editor del diario La Razón, y consejero del grupo Atresmedia, que controla La Sexta, Antena 3 y Onda Cero.

En la conversación mantenida durante una comida en un restaurante, a la que ha podido acceder La Base y sobre la que versará el programa de este martes (#LaBasePistoleros), participaron Villarejo; el comisario José Luis Olivera, exjefe de la UDEF y exdirector del Centro de Inteligencia contra el Crimen Organizado; el empresario Adrián de la Joya; y Mauricio Casals. El tema de conversación se centró en las armas. No hay que olvidar que el cuñado de Adrián de la Joya es Abdul Rahman El Assir, traficante de armas libanés, amigo de Juan Carlos I, reclamado por la Justicia española por delitos fiscales.

Casals se refirió en dicha conversación a un revólver que le regaló "el Cuerpo", en alusión a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Hay que recordar que fue condecorado como miembro honorífico de la Policía y de la Guardia Civil. Según fuentes de La base, Casals recibió el revólver tras ese nombramiento. El hombre fuerte del Grupo Planeta se quejó en aquella comida con sus amigos de que el arma del 'Cuerpo' le "pesaba mucho" y les participó que buscaba otra que "no pesara nada".

En un momento dado, el comisario Villarejo le ofreció un arma "sin papeles", es decir, que no estaba registrada. 

En este sentido, hay que recordar los numerosos negocios que hizo Villarejo en el ámbito de las sociedades offshore constituidas para blanquear el dinero del tráfico de armas y que este diario desveló en varias exclusivas. Poco antes de ser detenido, el 3 de noviembre de 2017, el comisario tuvo una conversación con un agente de policía, que también sería detenido poco después, en la que este le ofreció el arma de un miembro de ETA, sin registrar. 

Hay que destacar que tan solo un año después de este encuentro y otros encuentros que tuvieron lugar con los mismos protagonistas en 2016, tanto Casals como Francisco Marhuenda -director de La Razón- fueron citados a declarar ante la Audiencia Nacional en calidad de investigados, acusados de presuntas coacciones a la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, en el marco de la operación Lezo, sobre un presunto desvío de fondos del Canal de Isabel II para lucro personal.

El juez sospechaba que Casals y Marhuenda coaccionaron a Cifuentes para proteger al hombre fuerte del presidente madrileño entonces, Ignacio González, en el Canal de Isabel II, Edmundo Rodríguez, también detenido en ese escándalo de corrupción. Finalmente se levantaron sus imputaciones.