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PARTIDO POPULAR Casado evita definir a Vox como "populistas" y no aclara si pactará con ellos en las próximas elecciones

El líder del PP esquiva cualquier mención crítica al partido de Santiago Abascal en su primera entrevista tras la Convención Nacional del PP

El presidente del PP, Pablo Casado, saluda a los militantes a su llegada a la Plaza de Toros de Valencia en el fin de la Convención Nacional celebrado el domingo.
El presidente del PP, Pablo Casado, saluda a los militantes a su llegada a la Plaza de Toros de Valencia en el fin de la Convención Nacional celebrado el domingo. Manuel Bruque / EFE

El presidente del Partido Popular (PP), Pablo Casado, ha concedido en la noche del lunes su primera entrevista tras la Convención Nacional de su partido. Ha sido en el Telediario 2, de TVE, conducida por el periodista Carlos Franganillo. En ella, la relación de los populares con la ultraderecha de Vox ha sido uno de los asuntos principales. A pesar de la insistencia del periodista, Casado ha evitado definir como "populistas" al partido de Santiago Abascal. Tampoco ha aclarado si pactaría o no con ellos en las próximas elecciones generales. En definitiva, ha esquivado realizar cualquier crítica a la formación de ultraderecha. 

El bloque de preguntas sobre Vox ha comenzado recordando un vídeo de la moción de censura presentada por los de Abascal. "Hasta aquí hemos llegado", señaló Casado en un duro discurso realizado el año pasado y que parecía abría un nuevo tiempo en su relación. "Somos la única alternativa a Pedro Sánchez y un gobierno desgastado. Mandamos un mensaje diciendo a quien quiera cambiar el Gobierno que lo mas útil es unificar el voto", ha contestado el líder popular sobre la relación actual con el partido de Abascal. Sí que ha reconocido que tienen diferencias con ellos en asuntos como el "europeísmo" o el "Estado autonómico". Ha sido lo más parecido a una crítica en toda la entrevista.

Franganilo ha sido muy directo al preguntarle a Casado sobre si define a Vox como "populistas", en relación a intervenciones realizadas la pasada semana como las de Mariano Rajoy o Alberto Nuñez Feijóo. "No sé cómo se define cada partido", ha contestado. Justo seguido ha dicho que Podemos es "radical y comunista". "Es como se definen ellos", ha añadido. Y ha señalado que apoyan dictaduras como la de "Cuba y Venezuela". En este punto ha apuntado que Podemos ha recibido financiación de esos países, y también del "régimen de Correa en Ecuador" porque así lo dicen "papeles que se han ido publicando". Para Casado, el actual Gobierno es "el más radical de Europa" y su proyecto es de "centro reformista". 

El periodista de TVE le ha hecho a continuación mención sobre los Gobiernos de ultraderecha de Hungría y Polonia. Pero Casado no ha cambiado de opinión y ha seguido manteniendo que el español, formado por PSOE y Podemos, es el más radical del continente. En especial por la presencia de "ministros comunistas" y por los pactos con Bildu y los independentistas catalanes. En este sentido ha relacionado los ataques a la justicia de esos países con los que, a su juicio, hace el Gobierno de Sánchez en cuestiones como los indultos a los presos del Procés. 

Para Casado, el Gobierno de Sánchez es el "más radical de Europa", por encima de los de Hungría o Polonia

"A la gente le da igual cómo me llevo con Abascal o Sánchez. La gente está preocupada por el recibo de la luz o porque hay más desahucios. Queremos una alternativa para gobernar sin tener que pactar con partidos radicales como los que están en el Gobierno", ha contestado Casado sobre su relación personal con Abascal, excompañero de partido. "¿Vox es radical?", ha insistido Franganillo. Y aquí Casado ha esquivado, de nuevo, la pregunta, empezando a hablar de las "preocupaciones reales" de los españoles como las pensiones. 

Sobre si pactará con Vox, la respuesta de Casado tampoco ha sido clara. "Al final quien gana las elecciones acaba formando Gobierno, si sumamos más que la izquierda formaremos Gobierno y los acuerdos serán puntuales con otros partidos (...) Lo de menos son las alianzas que haya que hacer a un lado y a otro", ha dicho. 

Catalunya y "poner orden"

El líder del PP ha insistido en la idea, ya transmitida en su discurso de Valencia, de que su partido tiene que gobernar para "poner orden" en Catalunya. La situación de Carles Puigdemont ha sido otro de los temas clave de la entrevista. Ha hablado de que debe haber un "impulso político" para favorecer que las decisiones judiciales. Algo, que a su juicio, el Gobierno está evitando. "Están deseando que no traigan a Puigdemont a España porque revientan la legislatura. El Gobierno, en vez de ayudar diplomáticamente, está poniendo palos en la rueda", ha afirmado. Y para el líder del PP, la solución para el conflicto catalán se resume en "que cumplan la ley". 

En relación a la justicia, ha reconocido que están obligados a renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) con el actual sistema. Pero lo sigue condicionando a que el Gobierno se comprometa a cambiar la ley. "Estamos obligados. Pero el Gobierno quiere que se renueve con la ley actual y que dejemos la ley como está". "Quieren seguir ocupando el poder de la justicia. Conmigo que no cuenten para politizar a los jueces", ha añadido, culpando al Gobierno del bloqueo actual a pesar de sus giros en este asunto

"Amigo" de Ayuso pero evita apoyarla en el control de Madrid

Uno de los primeros temas en la entrevista ha sido la disputa con la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. Y su discurso en la Convención Nacional, del que han sido mostrados unos segundos. "En absoluto estaba en juego el liderazgo.
Somos amigos, cuando yo tuve la oportunidad de elegir la candidatura en Madrid, la elegí a ella y algunos tenían dudas. En las peores circunstancias ha sacado a Madrid adelante", ha dicho. 

Preguntado sobre si es el momento de adelantar el Congreso regional madrileño, como quiere Ayuso, ha destacado que a él no le corresponde y que hay una Junta Directiva que ya ha decidido el calendario. Esta será la siguiente batalla interna, las fechas de un cónclave para el que la presidenta tiene prisa, algo que no comparten en Génova. Casado ha evitado además apoyar si ella tiene que ser o no la presidenta del partido en Madrid. "A nivel orgánico no puedo decir quién tiene que ser la presidenta, no lo he dicho en otros sitios. Los militantes decidirán. Tenemos que estar a lo importante, en Madrid lo estamos haciendo bien. Con eso nos quedamos", ha zanjado. 

Sarkozy sigue siendo ejemplar

Otro asunto por el que le han preguntado a Casado ha sido por la presencia de Nicolas Sarkozy, expresidente de Francia, en la Convención Nacional de los populares. Fue condenado por financiación ilegal justo al día siguiente de su encuentro con el líder del PP. Casado lo ha seguido alabando. "Vino para reivindicar lo que hizo en la lucha contra ETA y el apoyo que nos dio en favor de la unidad nacional. Ojalá tuviéramos un presidente que dijera las cosas que el francés", ha dicho.

La derogación de leyes como la de la Memoria Histórica también ha sido mencionada. El PP quiere cambiarlas la ley actual por una de "Concordia". "Más debates en positivo y no esta izquierda que está siempre reabriendo debates para enfrentar", ha dicho.  El cambio de la ley de eutanasia por una de "cuidados paliativos" ha tenido su espacio. Al igual que la corrupción, con varios casos pendientes en los tribunales todavía. Algo que, según Casado, no va a desgastar al partido. "La nueva dirección no va a tolerar ninguna conducta irregular", ha dicho mientras señalaba al PSOE y los ERE o a "5 ministros de Podemos", sin dar más datos y sin tener causas judiciales abiertas. 

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