Una de las acusaciones populares del juicio al extesorero del PP Luis Bárcenas por la presunta caja B del partido ha solicitado al tribunal que prohíba el uso de mascarilla para los testigos que comparezcan por videoconferencia, un asunto que ha suscitado quejas entre algunos abogados.

La asociación Observatori DESC, representada en el juicio por los letrados Gonzalo Boye e Isabel Eibal, ha formalizado esta petición ante la sección segunda de lo Penal de la Audiencia Nacional, responsable de juzgar si el partido pagó con dinero negro de esa presunta caja B parte de la reforma de su sede, en la calle Génova de Madrid.

Lo hace tras las suspicacias que levantó en las últimas jornadas que algunos testigos –el más llamativo el caso de José María Aznar– que declaraban desde sus domicilios por videoconferencia lo hicieran protegidos por una mascarilla, circunstancia que, según hizo constar alguna acusación y subraya Observatori DESC en su escrito, obstaculizaba la inmediatez necesaria en una comparecencia.

El revuelo se hizo especialmente patente en la jornada en la que declaró el expresidente del Gobierno José María Aznar, quien llevaba mascarilla y, preguntado por ello, dijo que lo hacía porque respetaba "las recomendaciones de las autoridades sanitarias".

También lo hicieron todos los ex secretarios generales que han comparecido por videoconferencia, Javier Arenas, Ángel Acebes, Rodrigo Rato y María Dolores de Cospedal, a excepción de Francisco Álvarez Cascos, que también llevaba mascarilla pero fue el único que acudió presencialmente a la Audiencia Nacional.

Tras Aznar declaró el expresidente Mariano Rajoy que, sin embargo, lo hizo sin mascarilla, circunstancia que agradeció algún abogado.

Ahora, la acusación Observatori Desc ha pedido a la Sala que "antes del comienzo de cada declaración" se compruebe "que los testigos se encuentran aislados, solos y sin presencia de ningún tercero" y se ordene que declaren sin mascarilla