MADRID.- El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha presentado este viernes un decálogo de medidas para buscar otras soluciones a la situación de Grecia y de la zona euro, que pretende negociar con los partidos socialdemócratas europeos para consensuar una alternativa de izquierda a las políticas de Angela Merkel.

Sánchez explicó que lleva varias semanas hablando con distintos dirigentes socialdemócratas de Europa, y que a finales de mes la presentará en Bruselas y, posteriormente, en la reunión de los Partidos Socialistas Europeos.

En líneas generales, Sánchez indicó que el PSOE apuesta por más unión, “primero en el plano político, luego en el plano económico y, finalmente, en el plano social”. Y, por ello, aseguró que los socialistas defienden que Grecia siga en el euro, “porque el proyecto de la moneda única es irreversible”.

Asimismo, indicó que Grecia debe sentir la solidaridad de Europa y se deben buscar otras salidas que no sea su expulsión del euro. Sánchez destacó que este proceso lo está liderando el PSOE dentro de la familia socialdemócrata europea, y restó importancia a que puedan surgir diferencias con la socialdemocracia alemana que gobierna con Merkel.

El decálogo recupera viejas propuestas socialistas que habían quedado olvidadas y ha sido elaborado por Manuel de la Rocha, el secretario de Política Económica del PSOE.

Mutualizar la deuda pública europea

La primera de estas medidas y que, según Pedro Sánchez, es la solución, pasa mutualizar la deuda pública en Europa, una vieja idea socialista que había sido abandonada en los últimos tiempos. Es decir, crear un fondo de amortización de deuda común y empezar la emisión de eurobonos.

También plantea, ya más concretamente sobre el problema de Grecia, facilitar al país heleno unos plazos más flexibles y una rebaja de los tipos en su deuda. De momento, los socialistas no hablan de quita.

Otras medidas que propone son: acelerar el plan Juncker y dar prioridad en el mismo a los países con más altas tasas de paro; un plan de reindustrialización europeo, exigir al BCE que mantenga como objetivo de inflación el 2%, potenciar la unión política del euro, revisar el calendario y la senda de reducción de los objetivos de déficit público para todos los países, crear un plan de políticas activas de empleo y, finalmente, elaborar un plan contra la exclusión social.

El líder del PSOE cree que es urgente que la socialdemocracia europea tenga una respuesta a la actual situación por la que pasa Europa, diferenciada de las políticas conservadoras, y cree que este decálogo puede ser el germen de esa alternativa de izquierda que lideren los socialistas en Europa.