El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado durante la mañana del viernes la orden del Ministerio de Sanidad de prorrogar 14 días más la cuarentena obligatoria para los viajeros procedentes de varios países africanos. 

Hasta el 26 de diciembre, las personas que partan desde Botsuana, Eswatini, Lesoto, Mozambique, Namibia, Sudáfrica y Zimbabue, con o sin escalas, deberán confinarse durante diez días debido al alto riesgo por la variante ómicron de la covid-19. Las repúblicas de Malawi y Zambia han sido consideradas de alto riesgo debido a la proximidad con los países afectados.

Esta medida llega a pesar de que ómicron ya está en los países de la UE (212 casos confirmados en 18 países y 14 en España). Por esto, el cierre de fronteras y restricciones a viajeros solo de determinados países ha generado serias dudas entre los epidemiólogos ya que su efecto puede ser realmente limitado si ya está circulando por el mundo. Por otro lado, Sudáfrica ha denunciado que es una decisión muy insolidaria en este contexto de emergencia sanitaria ya que, además, durante el último año ha avisado en varias ocasiones de que nuevas variantes podían salir en los países pobres que no están recibiendo vacunas por el acaparamiento de las dosis de los ricos.

Los pasajeros en tránsito que sean residentes o titulares de visados de larga duración de países europeos y Estados asociados Schengen, Andorra, Mónaco, Vaticano o San Marino, que se dirijan a esos países, así como el personal aeronáutico necesario para llevar a cabo las actividades de transporte aéreo quedan excluidos de esta medida.

Las personas afectadas deben permanecer en sus domicilios durante la cuarentena y limitar los accesos de terceras personas. Al séptimo día del confinamiento, si se realiza una prueba diagnóstica con resultado negativo, puede finalizarlo.

Además, deberán restringir sus desplazamientos a cuestiones imprescindibles como adquirir alimentos, productos farmacéuticos o de primera necesidad, asistencia a centros de salud o por causas de fuerza mayor.