El enésimo capítulo del litigio por las obras de Sixena aún no ha terminado. Esta semana el juez Antonio Martín, titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Huesca, ordenaba que el Museo de Lleida entregue las 44 obras artísticas del Real Monasterio de Villanueva de Sigena (Huesca, antiguamente perteneciente a la Diócesis de Lleida) el próximo lunes, 11 de diciembre, como máximo. La fecha planteada por el magistrado para acceder al Museo de Lleida para hacer efectiva la entrega de las piezas es la misma que solicitó el Gobierno aragonés para el cumplimiento de la orden de ejecución de la sentencia de 2015 que condenó a la Generalitat y al Museo Nacional de Arte de Catalunya (MNAC) a entregar a los bienes reclamados.

El juez Martín, suplente del Juzgado de Instrucción Número 1 de Huesca desde septiembre, tiene prisa por "cerrar" este asunto, ya que esta misma semana será sustituido en su cargo de interinidad por la nueva jueza, María Teresa Puchol Soriano. Esta magistrada, que hasta ahora estaba destinada al juzgado de La Almunia de Doña Godina (Zaragoza), tomará posesión de su cargo esta misma semana.

Entra en juego el Juzgado de Lleida

Además, el caso del arte de Sigena no sólo se decide en los juzgados de Huesca —y con el 155, también en los despachos del Ministro de Cultura—, sino que ahora ha llegado a los tribunales de Lleida. Se trata de la demanda que presentó en julio del año pasado el Consorcio del Museo de Lleida a un juzgado de Rubí por el derecho de retención de las 44 obras que reclama Aragón. Este juzgado del Vallès se ha declarado, después de un año, incompetente, ya que las obras en litigio se encuentran en Lleida, y ha traspasado el caso los tribunales de la capital del Segrià.

Todas estas batallas judiciales pueden desembocar en un final precipitado el próximo lunes ya que en una providencia realizada el 1 de diciembre y publicada este pasado lunes, el juez acuerda que la Guardia Civil, en coordinación con el Gobierno de Aragón, ejecute el plan de seguridad necesario para llevar "a buen fin" esta decisión, "proporcionando seguridad al personal encargado de la retirada de los bienes y de su mudanza", así como para hacer cumplir lo acordado, autorizando para ello toda intervención "para llevarlo a término". 

El magistrado indica que se pide la colaboración y el auxilio de la Policía Nacional, la Guardia Urbana de Lleida y los Mossos "si fuera necesario", en cumplimiento de la Ley Orgánica de Fuerzas y Derechos de Seguridad.

Fuentes del Museo de Lleida aseguran que no harán declaraciones hasta que no tengan en sus manos el auto judicial de Huesca y lo puedan leer y valorar para decidir qué pasos podrán seguir.

Por otra parte, el alcalde de Lleida, Àngel Ros, anunció el envío de una segunda carta al ministro pidiéndole "prudencia" y que "no tome ninguna decisión irreversible". Por su parte, el Instituto de Estudios Catalanes defendió la "legítima propiedad" de las obras y su mantenimiento en Catalunya, sin dispersiones ni disgregaciones.

Recordemos que el ministro de Cultura, Íñigo Méndez de Vigo, que ahora es el responsable también de la Consejería de Cultura de la Generalitat para la aplicación del 11, anunció el pasado 28 de noviembre que acataría esta sentencia. Estas declaraciones ya desataron una tormenta política la semana pasada.