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El Toro de la Vega se celebra sin la muerte del animal pero con centenares de personas hostigándole durante el recorrido

La Junta de Castilla y León mantuvo la prohibición de matar al bovino mientras el Gobierno central presentó un escrito en la Fiscalía para impedir que se celebre.

Varias personas rodean al toro 'Manjar' durante la celebración de la festividad del Toro de la Vega en Tordesillas, este martes.
Varias personas rodean al toro "Manjar" durante la celebración de la festividad del Toro de la Vega en Tordesillas, este martes. R. García / EFE

El Toro de la Vega se ha vuelto a celebrar este martes en las calles de Tordesillas (Valladolid) dentro de un festejo que se ha desarrollado sin incidentes aunque envuelto en un debate jurídico-administrativo. La Junta de Castilla y León mantuvo la prohibición de matar al animal mientras el Gobierno presentó un escrito en la Fiscalía para impedir que se celebre

"Manjar", un imponente ejemplar de 560 kilos, corniveleto y perteneciente a la vacada de Albarreal, ha protagonizado el encierro programado por el Ayuntamiento de Tordesillas -con arponcillos en forma de divisa-, cuya suspensión cautelar ordenó hace cuatro días el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León a instancias del PACMA.

La polémica entre el partido animalista y el Ayuntamiento de Tordesillas continúa viva en los despachos tras la reciente denuncia de PACMA, interpuesta este pasado lunes, al considerar que la autorización concedida por la Junta de Castilla y León para este encierro no cumplía la antelación mínima de diez días exigida por el Reglamento de Espectáculos Taurinos Populares de la comunidad.

El alcalde de la localidad dice que hay "presión mediática"

El alcalde de Tordesillas, Miguel Ángel Oliveira (PP), ha lamentado la suspensión cautelar del torneo con divisas y ha achacado esta decisión del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León a la "presión popular y mediática", según explica a través de una nota informativa difundida al finalizar el espectáculo.

"Nuestra propuesta (un torneo a base de divisas con arponcillos) estaba avalada por veterinarios y especialistas en la materia donde en ningún momento se planteaba la muerte del animal en público", ha defendido el regidor antes de denunciar una suspensión que ha interpretado como "un ataque el medio rural, a nuestras tradiciones y a la tauromaquia en general".

Oliveira ha recordado que la suspensión ordenada por la Justicia es cautelar, es decir, "sin que haya habido juicio alguno", por lo que ha anunciado la intención de la corporación municipal de persistir "para que la nueva ordenanza reguladora sea una realidad en 2023".

El único incidente, la caída de una mujer

El encierro se ha celebrado sin incidentes con centenares de personas que han seguido al animal a lo largo del recorrido, desde su salida de un cajón situado en la Cuesta del Empedrado hasta los pinares situados cerca de la desembocadura del río Zapardiel en el Duero.

Una hora antes de la suelta, desde el casco urbano al campo abierto en un tramo de varios kilómetros, los asistentes han cubierto las talanqueras del tramo vallado, ocupado muros, balcones, torretas de conducción eléctrica y situado en remolques agrícolas.

A las once de la mañana, como es costumbre, un toque de reloj suelto y el lanzamiento de una bomba real ha anunciado la salida del toro, de casi seis años de edad, que apenas ha tardado cinco minutos en llegar hasta el puente.

El animal ha avanzado rápido hasta los prados, donde los jinetes han provocado al toro en varias arrancadas y ante la mirada de varios centenares de asistentes a pie. "Manjar" se ha refugiado en la zona de pinares hasta que a las 12.45 horas otra bomba real ha dado por terminada. El único percance informado ha sido la caída de una mujer desde una talanquera, que ha sido trasladada a un hospital para atenderla por un traumatismo cervical, han informado fuentes municipales.

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