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El Vall d'Hebron hace historia al realizar el primer trasplante de pulmón robótico sin abrir el tórax

El hospital barcelonés ha sido el primero del mundo en probar esta nueva cirugía, más limpia y mucho menos invasiva. Su aplicación tendrá efectos positivos en la recuperación de los pacientes.

Profesionales del equipo médico del Vall d'Hebron que han realizado el primer trasplante pulmonar completamente robótico del mundo.
Profesionales del equipo médico del Vall d'Hebron que han realizado el primer trasplante pulmonar completamente robótico del mundo. Hospital Vall d'Hebron / Reuters

El Vall d'Hebron acaba de hacer historia. Un equipo médico del hospital barcelonés ha completado de forma exitosa el primer trasplante pulmonar completamente robótico del mundo. La cirugía consiste en una pequeña incisión de pocos centímetros en la parte baja del esternón, por la que se retira el órgano enfermo y se introduce el nuevo. Con esta nueva técnica la operación se realiza sin necesidad de romper el tórax, es decir, de una forma mucho menos agresiva que la tradicional.

Un paciente de 65 años con fibrosis pulmonar ha sido el primero en someterse a esta intervención. En lugar de hacer una gran apertura que, hasta la fecha, obligaba a separar las costillas y partir el tórax, los facultativos del Vall d'Hebron han encontrado una vía más limpia para acceder a los órganos. "Es una técnica mínimamente invasiva", comenta Albert Jauregui, jefe de Servicio de Cirugía Torácica y Trasplante Pulmonar del hospital catalán, que asegura que antes era impensable hacerlo sin abrir toda la zona "como si fuera el capó del coche".

Además del corte principal se practican otras incisiones de menor tamaño en el lateral de la caja torácica para introducir los brazos y cámaras 3D del robot quirúrgico Da Vinci, con el que el cirujano controla la entrada y salida de los órganos. Esta nueva técnica requiere menos días de ingreso, menos complicaciones y favorece una recuperación "menos dolorosa" para el paciente. 

Desinflar el pulmón

Para introducir el nuevo pulmón, los especialistas desinflaron el órgano en quirófano con el objetivo de garantizar que se ajustaba a la apertura realizada debajo del esternón. De todos modos, al tratarse de una zona con piel "muy elástica", se puede ampliar la incisión "sin tener que tocar ninguna costilla", tal y como ha resaltado Jauregui.

La intervención se llevó a cabo a finales de febrero en el Hospital Vall d'Hebron y apenas duró cinco horas. El paciente operado, que padecía una fibrosis pulmonar, necesitaba el trasplante de al menos un pulmón. Cuando le propusieron la cirugía robótica, no tuvo ningún tipo de recelo, pues confía en que una máquina puede "evitar los riesgos del fallo humano". 

"El nivel del dolor ha sido cero"

El jefe de Servicio de Cirugía Torácica y Trasplante Pulmonar del Vall d'Hebron ha destacado que la cicatrización fue "muy rápida" y el paciente no tuvo prácticamente ningún dolor, algo que sí ocurría con el anterior procedimiento. De hecho, el propio protagonista quiso agradecer tanto al donante como a los equipos médicos del hospital su contribución: "Estoy encantado con todo. El nivel de dolor ha sido cero".

Una técnica con futuro

Jauregui ha reconocido que, aunque su eficacia está probada, todavía es una cirugía "muy nueva" y de momento solo se podrá ofrecer a "candidatos muy seleccionados". Con el tiempo, esta técnica se podrá aplicar a trasplantes de dos pulmones. El conseller de Salud de la Generalitat de Catalunya, Manel Balcells, ha destacado que pronto los resultados serán publicados en una revista científica y ha hablado del Vall d'Hebron como "referente mundial". 

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