En una 'innatural mezcla entre fútbol y economía', Goldman Sachs, uno de los mayores grupos de banca e inversión del mundo, ha publicado su análisis sobre la Copa del Mundo de Fútbol 2014, en el que estudia cómo el rendimiento de cada equipo puede afectar a la situación económica y viceversa. En su investigación, el grupo financiero ha calculado las opciones de cada selección en el torneo, el mejor 11, los jugadores con más posibilidades de terminar como máximo goleador o las aspiraciones futbolísticas de economías emergentes como China o la India.

En la quinta edición del informe, que comenzó su andadura en el Mundial de Francia '98, el equipo de economistas de Goldman Sachs, con ayuda de un algorritmo que contempla todos los enfrentamientos oficiales entre cada selección desde 1960, predice que la campeona del mundo será la anfitriona, Brasil, que derrotará por 3-1 a Argentina en la final. Serían precisamente los albicelestes los que eliminarían a la selección española en semifinales, tras empatar a un gol en el tiempo reglamentario.

A pesar de la derrota en semifinales, los economistas del grupo seleccionan a dos representantes españoles para el mejor conjunto del torneo. Los elegidos son el defensa del Real Madrid Sergio Ramos y el barcelonista Andrés Iniesta, seleccionado como cerebro del equipo en el mediocampo 'galáctico'. Goldman también destaca al trío de delanteros estrella de la liga española y alinea como mejores puntas a Cristiano Ronaldo, Lionel Messi y Neymar.

En el aspecto económico Goldman Sachs se hace la pregunta mágica: 'El Mundial atrapa la atención y desata enormes cantidades de pasión. Pero, ¿tiene algún impacto en el mercado bursátil?' Los expertos del grupo finaciero creen que sí, aunque igual que la mayoría de alegrías deportivas, 'es efímero'. 'El vencedor impulsa la economía mundial alrededor de un 3,5% el primer mes', detecta el estudio, pero 'se disipa significativamente' tras tres meses.

Para el vencedor, la Copa del Mundo también es un amor de verano en el terreno económico. De hecho, el estudio alerta de que 'la nación vencedora tiende a no mantener sus ganancias y, de promedio, su mercado de valores rinde un 4% por debajo de la media en el año siguiente a la final', una conclusión a la que los economistas llegan tras analizar el rendimiento de todas las economías vencedoras del Mundial desde 1974. Por ello, mandan un mensaje: 'Disfrutad de las ganancias mientras duren...'.