La policía alemana se incautó hoy del ordenador de la madre del joven de 17 años que la semana pasada perpetró una matanza en una escuela, mientras trata de esclarecer la veracidad del mensaje en internet donde presuntamente anunciaba el múltiple crimen.

Tras descartarse que el muchacho, Tim Kretschmer, lo hubiera enviado desde su ordenador, se buscan pistas tanto en otros aparatos que se encontraran en su casa o también en algún café o local con internet.

Los investigadores esperan asimismo información del servidor a través del cual se difundió el mensaje, en Estados Unidos, para establecer si efectivamente éste fue enviado antes de la matanza o si fue "construido" dentro del "chat" con posterioridad.

Kretschmer perpetró su matanza, en la que asesinó a bocajarro a nueve alumnos y tres maestras de su antigua escuela de Winnenden y luego a tres personas más al huir hasta acabar suicidándose, con una pistola automática Beretta propiedad de su padre.

La fiscalía de Waiblingen (sur de Alemania) ha abierto sumario por homicidio involuntario contra el padre, por no tener convenientemente guardada en una caja fuerte el arma ni tampoco la munición utilizada, más de un centenar de balas.

El padre del muchacho tenía en casa, además de la Beretta, en el dormitorio, otras 16 armas y 4.600 balas en la caja fuerte, de la que al parecer su hijo conocía el código secreto.

El caso ha conmocionado a la opinión pública y a la clase política alemana, cuya plana mayor, encabezada por la canciller Angela Merkel y el presidente Horst Köhler, asistirán a los funerales por las víctimas, el próximo sábado en Winnenden.

Las autoridades locales calculan que acudirán a la ceremonia entre 30.000 y 100.000 personas.

En los días posteriores a la matanza, ocurrida el pasado día 11, se sucedieron falsas alarmas en otras escuelas del país, así como mensajes alertando de nuevas masacres y amenazas telefónicas.

Uno de ellos, un muchacho de 17 años asimismo de la misma región que Kretschmer, difundió una imagen suya en internet, enmascarado y con una pistola, donde amenazaba con otro baño de sangre.

El joven ha sido internado en un hospital psiquiátrico, informó hoy la policía.