El máximo accionista del Levante, Pedro Villarroel, ha vendido su paquete accionarial (70,3 por ciento) al presidente del consejo de administración del club, Julio Romero, en una operación que ha sido acordada esta mañana en las oficinas de una empresa de Villarroel.

Según ha hecho público el club a través de un comunicado oficial, Romero será el propietario de las acciones de las que la Fundación Deportiva Cultural del Levante era titular, aunque tal y como anunció ayer Villarroel seguían estando en sus manos.

"Los detalles de dicha transmisión se harán públicos tan pronto se produzca la misma, una vez se obtengan las autorizaciones administrativas pertinentes por parte del Protectorado de Fundaciones", añade la nota.

Al parecer, la operación se podría haber cerrado por un precio simbólico, aunque este extremo no ha sido confirmado.

El presidente del Levante ha adquirido el paquete accionarial mayoritario a título individual "con el fin de evitar que, transmitidas a entidades con órganos de administración colegiados, el acuerdo de éstos impida su fácil transmisión a terceros".

Además, el comunicado insiste en que esta operación se realiza "con la finalidad de facilitar un plan de viabilidad de la entidad deportiva y comprometiéndose de modo irrevocable a ponerlas a disposición del Ayuntamiento de Valencia, o de entidad pública o privada pactada con éste con el objetivo final de desarrollar el plan de viabilidad anunciado por el consistorio".

Todo esto será ratificado ante notario por el presidente del Levante "tan pronto se instrumentalice la transmisión", concluye el texto.

Por otra parte, el portavoz del club, Javier Navarro, explicó a Efe que "no podemos adelantar acontecimientos porque dependemos de unos trámites legales que necesariamente implican cierta espera. Todos tenemos ganas de que esto acabe".

Además, el consejero Víctor Santamaría, responsable del área jurídica del club, informó a Efe de que el consejo se ha puesto en contacto con los jugadores en cuanto ha tenido constancia de la operación de venta de acciones para tranquilizar a la plantilla y evitar cualquier tipo de "plante" como el de esta mañana en la ciudad deportiva de Buñol.