La novela de un chileno, la música de un mexicano y la voz de un español: en definitiva, el idioma y la cultura hispanoamericanas son claves en "Il Postino", una ópera cantada en castellano y con la que su protagonista, Plácido Domingo, ha querido reivindicar la lírica en esta lengua.

"No nos falta talento", declaró el tenor en una entrevista exclusiva a Efe en el vienés Theater an der Wien, donde mañana tendrá lugar el estreno europeo de la obra escrita por el mexicano Daniel Catán, basada en la novela de Antonio Skármeta "Ardiente Paciencia".

Domingo, que encarna al poeta Pablo Neruda en su relación con el cartero Mario Ruoppolo, insistió en que la idea de Catán de hacerla en español "ha sido fantástica".

"Como compositor mexicano que es ha tenido un gran valor, tiene mucho mérito, sobre todo habiendo escrito la obra para Los Ángeles", dijo Domingo en relación al estreno en septiembre en la ciudad estadounidense, donde la obra tuvo un fulgurante éxito.

La estrella de la ópera recordó que el escritor Mario Vargas Llosa está a punto de recoger el Premio Nobel de Literatura para insistir en que en la literatura en español "hay historias extraordinarias que se pueden convertir en ópera".

"Yo les animo" retó Domingo a los compositores hispanoamericanos y aseguró que a él "le entusiasma ayudar a alguien que quiera escribir".

Sobre a la escasa presencia del español en la ópera, el propio Catán explicó a Efe las dificultades que encuentra en países como España para lograr una mayor difusión de este género en castellano y también que incluso en Estados Unidos encuentra más apoyo que en su país natal.

"Mi deseo es crear una tradición y aprovechar el grandioso talento que hay en Hispanoamérica", señaló Catán al recordar que España no fue capaz de crear una tradición operística como lo hicieron Francia, Italia o Alemania.

"La identidad de la obra va más allá del lenguaje y se refiere a la cultura que hay detrás, no sólo al lenguaje, que es un vehículo más, no el único", dijo Catán, cuyas óperas han triunfado en Estados Unidos y muchos otros países.

Tras los estrenos de Los Ángeles y Viena, la obra se representará en París y también hay planes para llevarla a Madrid, Valencia, México y Chile.

"Estamos haciendo de embajadores de la música y la ópera en español", dijo por su parte el tenor madrileño Israel Lozano, que interpreta a Mario Ruoppolo, el cartero ficticio con el que Neruda entabla una entrañable amistad durante su exilio en una isla italiana.

Lozano destacó el fantástico elenco reunido para esta obra, en las que son mayoría los artistas españoles y latinoamericanos, y se refirió a que la posibilidad de poder cantar en su lengua materna permite "exprimir cada palabra, cada coma, cada giro, cada jerga".

Respecto a la obra en sí, Catán insistió en la intersección de varias historias de amor: la del cartero y su anhelo por conquistar a la bella Beatrice; la de Neruda y su esposa Matilde; y la de los dos hombres, en una relación que el compositor describió como la de "un alumno y su maestro".

Por eso, el mexicano aseguró no poder imaginar "un mejor interprete para abrazar este proyecto que Plácido Domingo, que ha sido un mentor para tantos jóvenes artistas".

La ópera "Il Postino" sigue la estela de la película "El cartero (y Pablo Neruda)", dirigida en 1994 por Michael Radford y en la que se narra la amistad entre el poeta y un cartero, al que ayuda a conquistar a Beatrice y a descubrir el amor por la poesía.

Respecto a sus objetivos para el futuro y el hecho de que ya lo ha logrado casi todo en el mundo de la ópera, Domingo empleó un símil futbolístico y al equipo de su corazón para justificar su deseo de seguir haciendo cosas.

"El Real Madrid tiene 9 copas (de Europa) pero quiere una décima. Siempre se va a más. Como artista quiero hacer bien lo que haga. Dentro de eso habrá cosas que entusiasmen muchísimo como un estreno mundial, la inauguración de un teatro, una obra nueva. Lo que quiero es hacer bien lo que haga, y con eso tengo bastante", dijo.

Antonio Sánchez Solís