El presidente del Senado, Javier Rojo, ha señalado hoy que no es "previsible" que la reforma constitucional sea modificada en la Cámara Alta, en la medida en que los dos grandes partidos, PSOE y PP, buscan su aprobación cuanto antes.

En declaraciones a Onda Cero recogidas por Efe, y preguntado por la posibilidad de que un diez por ciento de diputados o de senadores pida la convocatoria de un referéndum, ha respondido: "No parece que eso pueda ocurrir".

Rojo ha explicado que, en el supuesto de que fuera modificado el texto en su tramitación en la Cámara Alta, tendría que reunirse una comisión Congreso-Senado "para dar curso a esa cuestión", aunque estaría "fuera de plazo" debido a la convocatoria de las elecciones generales.

El artículo 167 de la Constitución señala que si no hubiera acuerdo entre el Congreso y el Senado en la reforma, "se intentará obtenerlo mediante la creación de una comisión de composición paritaria de diputados y senadores, que presentará un texto que será votado" por ambas cámaras.

El presidente del Senado ha dicho que las enmiendas de los grupos a la reforma constitucional que coinciden con las que presentaron en el Congreso tendrán "la misma suerte" y serán rechazadas porque "no tienen encaje en el procedimiento ni en lo que se va a discutir".

Rojo se ha referido así a la decisión que debe adoptar hoy la Mesa del Senado sobre las enmiendas a la reforma que los distintos grupos parlamentarios han registrado en el Senado sobre la necesidad de convocar un referéndum y el derecho de autodeterminación.

Ha defendido la reforma porque da "más seguridad" a lo que se está haciendo contra la crisis y por el consenso alcanzado entre los dos grandes partidos PSOE y PP frente al enfrentamiento anterior "que nos ha hecho más débiles y ha generado menos confianza ante los ciudadanos".

Ha recordado que, una vez calificadas las enmiendas por la Mesa del Senado, se reunirá la Comisión Constitucional de la Cámara que deberá dictaminar la reforma antes de que sea debatida, mañana, por el Pleno.

Se ha dirigido a los que descalifican la reforma alegando que rompe los consensos constitucionales y ha hecho hincapié en que es "legítima" porque los dos grandes partidos se han puesto de acuerdo.

"Parece que algunos entienden que si no están ellos no hay consensos", ha agregado Rojo, quien ha recalcado que se ha intentado "por todos los medios" sumar a más partidos a la reforma "y no por eso hay que dejar de hacer lo que se está haciendo".