Las fuertes de lluvias que desde ayer caen en el centro y este de España hundieron parte de la vía de la línea del AVE entre Madrid y Alicante y obligaron a parar el tren a la altura del municipio de Alpera (Albacete). Aunque en un principio se informó de que la locomotora del AVE había descarrilado, fuentes de Adif aseguraron posteriormente no había sido así , sino que la locomotora tuvo que detenerse debido a las balsas de agua acumuladas en las vías debido a las tormentas.

A las 19:46 horas del miércoles, fuentes del Servicio de Emergencias 112 anunciaron que la locomotora del tren de alta velocidad Madrid-Alicante había descarrilado, aunque sin que se produjeran heridos. La locomotora, aunque no perdió los raíles, quedó algo vencida hacia el costado izquierdo debido a un ligero hundimiento de las vías, según se puede constatar en las fotografías proporcionadas por Efe.

Sin embargo, Adif informó minutos después que el incidente se debió a 'causas meteorológicas' que inundaron parte de las vías del tren y que no se produjo ningún descarrilamiento.

Adif consideró que las balsas de agua que se formaron en las vías 'hacían inseguro el trayecto', lo que obligó a trasladar a sus destinos a los 220 viajeros del tren por otros medios de locomoción.

Además, según Adif, los demás trenes de alta velocidad se desviaron hacia otras vías de ancho convencional.

Las citadas fuentes de Adif explicó que los incidentes ferroviarios por inundación en las vías no son comunes, y que en lo que va de año no se había producido ningún incidente por este motivo.

Hasta el lugar del incidente se desplazaron efectivos de la Guardia Civil hasta que Adif dispuso el transporte alternativo para los viajeros afectados.