El Espanyol, con una efectividad cara al marco rival casi del cien por ciento, rentabilizó a la perfección los dos goles del delantero José Callejón y se llevó los puntos (1-2) del Sánchez Pizjuán ante un Sevilla que en esta ocasión volvió a destapar una vez más sus enormes carencias defensivas.

Tenía el conjunto andaluz una buena oportunidad para ratificar su recuperación, después de una pésima racha de cinco partidos de Liga perdidos consecutivamente que ha paliado con dos triunfos seguidos en este torneo -Osasuna (1-0) y Real Sociedad (2-3)- y la buena marcha en la Copa del Rey.

Enfrente, no obstante, se encontró con un rival de los más destacados hasta el momento de la campaña y que camina por puestos europeos de la clasificación, por lo que se preveía una prueba dura, como así fue. El Espanyol salió dinámico pero, como habitualmente fuera de casa, con menos pólvora que en su campo y en esta ocasión aún menos por la ausencia por lesión de su goleador, el argentino Pablo Daniel Osvaldo.

Los locales tomaron paulatinamente la iniciativa y el brasileño Luis Fabiano, en dos ocasiones, y el campeón de mundo Jesús Navas, en otra, estuvieron cerca de batir al meta camerunés Carlos Kameni, pero el tiempo pasó y el gol se resistió ante un rival bien armado en la defensa y con la confianza de salir a la contra.

El partido entró en la última fase del primer período con un equipo local con muchas ganas pero atascado cuando el balón tenía que circular por las inmediaciones del área visitante, sin que Jesús Navas y el argentino Diego Perotti supieran entrar con fluidez por sus bandas.

El conjunto que dirige el argentino Mauricio Pochettino pareció conformarse con eso en busca de irse al descanso con el empate inicial, pero un balón en largo cogió las espaldas de la defensa sevillista y José Callejón, sólo ante Javi Varas, logró adelantar a los suyos en el marcador a falta de cuatro minutos para que se cumpliera el tiempo reglamentario en esta parte. No hizo el Espanyol más que el Sevilla para el 0-1, pero fue muy efectivo en la definición y los hombres los dirigidos por Gregorio Manzano tuvieron en la segunda parte, como ya sucedió el sábado pasado en San Sebastián y el miércoles en Villarreal en la Copa, remar contracorriente para volver a solucionar el entuerto.

Pases largos del centrocampista marfileño Ndri Romaric sobre Luis Fabiano y el malí Frederic Kanouté volvieron a crear peligro para los sevillistas a las primeras de cambio, aunque también Javi Márquez tuvo el 0-2 en sus botas, pero lo impidió Javi Varas. Como en la primera parte, la formación hispalense lo intentó siempre pero sin precisión, aunque ahora el Espanyol intentó salir más rápido para dejar el choque más encarrilado.

En esta dinámica parecía más claro que los locales consiguieran el empate, pero Kameni también se hizo notar para que el tiempo pasara y ello no sucediera, y más cuando Callejón se aprovechó de un monumental despiste de la defensa sevillista para poner el 0-2 a los 78 minutos, lo que dejó ya sentenciado el choque, ya que el tanto de Álvaro Negredo, en la prolongación, no pudo dar más de sí.